Lo primero que debes tener en cuenta si quieres empezar a bailar es que este tipo de disciplinas se disfruta mucho y además es un beneficio para el cuerpo. El primer paso es elegir una canción que te guste y puedas disfrutar y el segundo es moverte libremente, intentando seguir el ritmo de la música.

Una vez que tu cuerpo acompañe la melodía, descubrirás tu fuerte y tus debilidades. Podrás probar movimientos nuevos e incluso te desafiarás a ti mismo en caso de ponerte pruebas y obstáculos para mejorar día a día.

La clave está en tener constancia, dedicarle un poco de tiempo día a día a esta nueva práctica. En el inicio, empezar con media hora para después agregar media hora más y poder hacer ciclos de dos horas con un descanso en el medio. El cuerpo y la mente se acostumbrarán rápido.

En BuscaTuProfesor, una página especializada en ofrecer profesores en línea, puedes contactar a un profesor de danza que te ayude con la parte técnica. Esto significa, las formas correctas de colocar las manos y los pies, de pararse antes de iniciar la coreografía y los nombres de los pases de baile.

Además, en “Busca tu profesor online” es posible que elijas qué tipo de disciplina te gusta dentro del baile, si el hip-hop, la danza clásica, el rock, el ballet. En base a tus gustos puedes contactar a cualquiera de las personas, luego de analizar su perfil y para establecer los términos de cada clase.

Primer paso para aprender a bailar: empezar por los pies

Mover los pies es lo más simple y a veces inconsciente que hacen las personas cuando comienzan a escuchar una melodía que les atrae. Bien, eso significa que hay ritmo en tu interior y que quieres potenciarlo. Para empezar a bailar debes iniciar con un movimiento de pies que sea sincrónico, perfeccionarlo, amigarte con este y darle nuevas formas.

Segundo paso para aprender a bailar: seguir por los brazos

Uno no baila si no es con todo el cuerpo, eso está claro. Al movimiento de los pies, puedes agregar uno de brazos que lo acompañe. Lo ideal es que lo hagas como si nadie te estuviera mirando, luego habrá tiempo para perfeccionar en tus técnicas y temer por alguna posible equivocación aunque sean mínima y nadie la note.

Tercer paso para aprender a bailar: sentir la música

Si la música no se siente, no tiene sentido que empieces a bailar. Así como lo mencionamos anteriormente, debes disfrutarlo y desconectar tu mente, estar en el momento y permitirle a tu cuerpo moverse libremente por los espacios de toda tu casa.

Subir el volumen es una buena opción y en caso de que convivas con más personas o no quieras molestar a tus vecinos, una posibilidad es usar los auriculares. Incluso muchos profesores de danza lo recomiendan ya que permite abstraerse y no escuchar más sonido que el de la canción que escuchas.

Cuarto paso para aprender a bailar: coordinación

La coordinación se trabaja y se practica. Es como aprender a sumar y a leer, con práctica y constancia, ambas cosas pueden hacerse perfectamente por años. Bailar frente a un espejo puede ser de gran utilidad, principalmente porque puedes observarte a ti mismo y lejos de juzgar tus movimientos, practicar para que estos mejoren día a día.

Saber qué tipo de música te gusta es esencial para saber qué bailarás. Si bien es respetable querer bailar y conocer todos los ritmos, cuando se busca perfeccionar es realmente cuando una persona puede potenciar sus habilidades.

No todos los ritmos musicales tienen los mismos pasos y trucos. Por ejemplo, un profesional del ballet no hará las mismas figuras que un profesional del hip-hop, la potencia en sus movimientos, los giros y los saltos hacen que estos dos tipos de música se diferencien notablemente.

Si aún no estás seguro de qué ritmo te gustaría bailar, lo recomendable es que pruebes todos los días una música distinta y dejes a tu cuerpo bailar a su ritmo. Con los días, encontrarás el que se amolde a tus gustos, tus movimientos y tu energía y podrás evolucionar hasta convertirse en un experto.