Claudia Blasi es la mamá de Aymará, la novia de Lucas Caro, el joven al que Matías Vázquez atropelló, mató y dejó abandonado en febrero.

Justamente, ella y su hija estaban caminaban junto al adolescente, a la vera de Bustillo, cuando ocurrió el hecho.

Ante la noticia de que Vázquez esperará libre, con una tobillera electrónica, que la sentencia quede firme, a pesar de la satisfacción por saber que ya no se le descontarán días de cárcel, más que los que pasó en prisión domiciliaria hasta que se dispuso esta medida, Claudia sostuvo: “Me desespera la idea de cruzármelo”.

“Aymi no quiere estar sola”, dijo, acerca de la sensación que embarga a la hija.

Indicó, justamente, que la chica egresó el viernes del secundario, pero que no había podido disfrutar en plenitud el cierre de etapa por “el dolor que va a la par de ella”.

Aymará, durante su egreso, junto a su abuela y los abuelos de Lucas.

Además, el sábado, Lucas hubiera cumplido dieciocho años.

Claudia habló de la mezcla de sentimientos: “Son fechas que sensibilizan el corazón. Como mamá, mis emociones son cruzadas. Mi hija egresó y pensaba en Lucas –sus sueños, los planes de ir a estudiar a Buenos Aires– porque el suyo era un amor con futuro. Luego, lo del cumpleaños...”.

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“Soy una mamá que lucha por tratar de seguir, callando la mente”, expresó, a la vez que detalló que sufre, también, por el dolor con el que carga Verónica Salinas, madre de Lucas.

Sobre Vázquez, manifestó: “Festeja su libertad, sin medir el daño hecho”.

“Para él, la vida sigue; la nuestra está opacada, repleta de preguntas, de tristeza”, añadió.