El arma de fuego que secuestró la Policía de Río Negro, luego del ataque a balazos desde un auto a otro ocurrido en pleno centro de la ciudad, corresponde a un robo efectuado semanas atrás en una vivienda de Dina Huapi.

El damnificado, quien tenía registrada a su nombre el arma sustraída, radicó la denuncia en la Comisaría 36º de la localidad vecina, luego de que autores ignorados ingresaran a su vivienda y se llevaran distintos elementos, entre los que estaba el arma calibre 9 milímetros.

Al constatar la numeración de la misma, los efectivos lograron determinar que correspondía a ese ilícito. El lunes a la tarde, un sujeto y una adolescente efectuaron disparos desde un Ford Focus a un Nissan March.

Cuando trataban de escapar del ataque a tiros y eran perseguidos por la Policía de Río Negro, la joven que iba como acompañante arrojó el arma de fuego por la ventanilla aunque los uniformados vieron el movimiento y lograron recuperarla.

Tenía varios proyectiles en recámara y estaba lista para ser disparada. Durante la fuga, el Focus colisionó a otro vehículo en la intersección de Mitre y Diagonal Capraro, lo que facilitó a los uniformados de la unidad policial dar con los intervinientes.

El otro rodado involucrado en el episodio también fue secuestrado por la Policía de Río Negro. Lo curioso es que su conductor pasó frente al operativo donde tenían detenido al conductor del Focus y los efectivos policiales lo reconocieron e iniciaron la persecución.

A bordo de ese vehículo se encontraron estupefacientes, por lo que una de las hipótesis del caso es que el enfrentamiento se produjo como un presunto ajuste de cuentas narco.

Como saldo del episodio los dos conductores resultaron imputados: uno por portación de arma de fuego sin la debida autorización legal y el otro, por encubrimiento por receptación sospechosa. Al primero, además, se le impuso una prisión preventiva de un mes. En tanto, se investigada la presencia de droga en la Justicia Federal.