“Siempre estamos haciendo prácticas, pero es bueno reactualizarse y ver los cambios que hay”, dijo el guía de trekking en cordillera, Javier Rey, acerca del curso de Socorrismo en Ambientes Rurales, Naturales y Agrestes que la Asociación Argentina de Ecoturismo y Turismo Aventura (AAETAV) brindó, con la subvención del Ministerio de Turismo y Deporte de la Nación, en la sede del Servicio de Prevención y Lucha contra Incendios Forestales (SPLIF), en el camino al cerro Catedral, dentro de un programa que incluye a doce provincias (en el caso de Río Negro, Bariloche fue la ciudad escogida para su desarrollo).

“Siempre, por una razón u otra, se me hacía difícil participar en la propuesta de AAETAV”, explicó Rey.

En ese sentido, comentó: “En este caso, me anoté y me permitieron acceder”. La aclaración remite a la cantidad de personas anotadas para intentar formar parte de la actividad (gente relacionada con el turismo aventuras y miembros de diferentes fuerzas de seguridad para los cuales el conocimiento en socorrismo es de vital importancia). Tras inscribirse, había que aguardar una selección en base a los perfiles de necesidades en torno a la labor desarrollada.

Así, Javier fue uno de los treinta escogidos.

“Se trata de introducirse en lo que es mayor seguridad”, expresó.

“Lo bueno de esto es poder venir y revalidar conocimientos, seguir aprendiendo, continuar formándose para contar con mejor experiencia en los cuidados”, señaló.

“Me ha tocado usar algo de estos saberes, pero, por suerte, en situaciones no graves, como esguinces de tobillo, y cierta situación de algún golpe en la cabeza que por suerte no fue mayor. Es decir que no hubo situaciones extremas”, expuso. Sobre ese punto, añadió: “En realidad, ojalá no tengamos que usar estas cosas nunca”.

Más allá de ese deseo, contó: “Suelo realizar cursos similares, pero este puntualmente es excelente”.

“Los instructores tienen mucha experiencia y se nota, nos cuentan sus vivencias, están en el trabajo constante en el terreno y eso, para nosotros, está buenísimo, porque aprendemos de los que nos dicen que les tocó pasar, cuestiones que vivieron en carne propia”, afirmó.