La farmacéutica Marcela Coretti es referente de la zona andina del Colegio de Farmacéuticos y compartió su preocupación sobre el notable aumento del consumo de medicamentos psicotrópicos. 

Los medicamentos se dispensan con receta por duplicado. Una copia es guardada por la farmacia y se vuelca en un libro recetario. “Por mes, se llenaba una carilla. Y en pandemia lleno de dos a tres carillas”, ejemplificó Marcela en "Chocolate por la noticia" que se emite en El Cordillerano Radio (93.7). 

Además, comentó que hay medicamentos de venta libre asociados a la posibilidad de tener un mejor sueño, como té de tilo o melatonina que también se vendieron mucho. 

“Es una situación social provocada por la pandemia que interrumpió nuestra cotidianidad”, explicó y agregó es natural que en este contexto se generen problemas vinculados a la falta de sueño, ansiedad o una incertidumbre exacerbada. 

Los números en Bariloche se confirman con las estadísticas a nivel nacional. Un informe de la Confederación Argentina Farmacéutica (COFA), abarca específicamente los medicamentos que actúan sobre el sistema nervioso central (no incluye nombres comerciales), muestra un crecimiento promedio de 6,50% en 2020: el mercado de ese grupo se extendió en 6.990.573 unidades. Entre los aumentos más significativos, por encima del promedio, se destacan los neurotónicos (10,04%); los hipnóticos y sedantes (9,18%) y los antipsicóticos (8,59%).

Marcela apuntó que los farmacéuticos son agentes primarios de la salud. Esa relación se vio intensificada durante la pandemia porque muchas personas no podían llegar a sus médicos, “y más allá de eso, sucede que como estamos en el barrio hace más de 20 años, conocemos las familias, sus historias. Vienen y preguntan '¿qué hago?'”. 

Consideró que el trabajo intenso durante la pandemia fue agradable y también desagradable. Por un lado, “porque disfruto mucho del contacto con el paciente, el cuidado y la consulta. Estudié para eso, no para vender cajitas”. Y por el otro costado, Marcela observó que se dio un comportamiento mercantilista de la propaganda de tanto medicamento en los medios de comunicación. “La gente viene, los pide, y muchas veces no es lo más adecuado”, dijo. 

También hubo un notable crecimiento en la venta de ivermectina, el antiparasitario que recibió el respaldo de profesionales para enfrentar la enfermedad. “No hay estudios definitivos que hayan comprobado la efectividad como preventivo o efectivo ya con el virus instalado en el organismo”, comentó, “aunque en tiempos de desesperación, la gente se agarra de cualquier cosa. Y más con un medicamento que no tiene efectos secundarios”.