Por la falta de grandes nevadas durante este 2021, muchos empezaron a recordar otros años similares. Marta “Colo” Jereb compartió con El Cordillerano imágenes y anécdotas de 1990: se hizo una bajada de antorchas corriendo, se trasladaba nieve en las camillas de los patrulleros y los pomas se subían corriendo o en bicicleta.

“Juntábamos la nieve con los patrulleros en las camillas, porque las máquinas no podría pasar, y la llevábamos a los caminitos”, recordó Marta sobre el invierno de 1990.

La instructora con más de cinco décadas de experiencia detalló que, con trabajo a pala, completaron el camino que une Punta Princesa, con la construcción en la que en ese momento funcionaba TAGE.

“Ese invierno fue todo así, en Lynch se pudo esquiar solo al principio, después nada. Desde Punta Princesa únicamente se podía bajar hasta el Poma 2000”, relató.

“Esas fotos donde están los chicos en el pasto es ahora donde está la silla de las nubes”

Comparando ese invierno con el actual opinó: “Ahora no subí, pero por lo que veo desde abajo, creo que hay más nieve que en el 90”.

Entre las anécdotas ilustradas por las imágenes que guarda en un cuaderno, compartió que varios instructores usaban el medio de arrastre corriendo o en bicicleta, hasta alcanzar los manchones de nieve, para desde ahí, subir de la forma convencional.

“Las tablas que usábamos eran viejas, porque eran puros rayones”, destacó.  

Otra curiosidad que rescató fue que la tradicional bajada de antorchas se realizó a pie por la tierra. “Bajamos corriendo, paramos a armar una estrella de nieve y seguimos”, revivió.