Sofía Carro, tal como hacía llamarse, cayó desde unos 10 metros de altura. Los primeros datos a los que accedieron los investigadores indican que estaba sentada sobre la baranda del puente y habría resbalado cuando se tomaba una selfie.

La versión surge del amigo de Aldana Boca -su nombre legal- quien es el único testigo del hecho. El joven de 21 años fue demorado por la Policía de Río Negro, aunque fuentes judiciales indicaron que su traslado a la dependencia policial “no se produjo en el marco del legajo, sino de forma preventiva, por averiguación de antecedentes”.

Ambos llegaron al lugar a bordo de un vehículo VW Gol que fue secuestrado para ser peritado, como así también dos teléfonos celulares: el de Sofía y el del joven.

Cuando ocurrió el hecho, de acuerdo a los trascendidos, compartían una cerveza. El envase quedó sobre el puente y también habría sido secuestrado.

Tras la caída, el amigo de la joven habría descendido al arroyo para tratar de rescatarla aunque tras recorrer varios metros, la perdió de vista. Decidió entonces correr hasta el destacamento que la Policía de Río Negro tiene sobre la calle Félix Goye, en el corazón del histórico poblado.

El operativo comenzó minutos más tarde cuando desde la Policía dieron aviso a bomberos sobre el episodio.

Cuando supieron del hecho, los familiares de la joven fueron hasta el lugar. Los investigadores tomaron testimonios para saber cómo se produjo la caída.