Se trata de una propuesta del bloque de concejales del Frente de Todos, que está en debate en las comisiones del cuerpo legislativo municipal.

La iniciativa plantea la declaración del montañismo y los deportes asociados, “como actividad de interés cultural y sociorecreativa en razón del aporte positivo a la cultura, el ambiente y a las actividades de desarrollo humano”.

Se incluyen dentro de las actividades del montañismo al senderismo, el trekking, el ascensionismo y la escalada, el ciclismo de montaña y las carreras de montaña, y las técnicas necesarias para concretarlas.

Se establece que con el fin de sostener y garantizar el acceso a diferentes espacios de montaña, “el municipio podrá efectuar todas las acciones jurídicas que fueran necesarias, tales como convenios con organizaciones públicas o particulares, presentaciones administrativas o judiciales, enviar proyectos de ordenanza al Concejo Municipal, dictar resoluciones en el ámbito de su competencia, y toda medida legal que posibilite el logro de esos objetivos”.

Los deportistas Manuel Rapoport, Martín Raffo, José Bonacalza, Alejandro Micocci y Santiago Díaz, son los colaboradores de la iniciativa y formaron parte de su discusión en la comisión de Obras y Planeamiento. 

En ese marco, Rapoport destacó el valor de la escalada como un deporte, “muy integral y saludable, en el espacio natural”, el cual necesita de las piedras, el soporte de esta actividad. Raffo señaló que Bariloche “es un paraíso” para desarrollar deportes de montaña. Destacó la necesidad de ampliar y mejorar la infraestructura, como la señalización de diversos senderos y la creación de otros.

Afirmó que el ciclismo de montaña, “es un importante motor turístico para que nos visiten ciclistas de todas partes del mundo”. En tanto, Bonacalza, Micocchi y Díaz resaltaron el crecimiento de la escalada que viene registrándose desde hace varios años tanto a nivel nacional como zonal.

El proyecto reconoce las “sendas de uso histórico”, que son aquellos senderos que han perdurado en el tiempo y que son reconocidos por la población, sin haberse modificado su trazado. También reconoce como “espacios de uso deportivo”, a todos aquellos sectores que se han utilizado a lo largo de los años con fines para la práctica del montañismo en sus diversas modalidades.