Una mujer llamó a la Policía para denunciar que su hijo llegó a su casa con dos camperas nuevas y sospechó que las mismas eran robadas ya que ambas tenían etiqueta y alarma antirrobo.

El curioso episodio trascendió este martes en el Alto de la ciudad. La mujer se comunicó con el teléfono de emergencias para denunciar lo que, según su sospecha, era parte de un hecho delictivo.

Es que su hijo regresó a su casa con dos camperas nuevas, las cuales tenían etiqueta, lo que no llamó tanto su atención como las alarmas que ambas aún tenían colocadas.

La Policía acudió al domicilio de la mujer y procedió al secuestro de las prendas, que habrían sido sustraídas de un local comercial.

El responsable de llevar las camperas al domicilio fue identificado en el lugar y detenido por las autoridades policiales.