Los jueces Romina Martini, Marcos Burgos y Marcelo Álvarez Melinger debieron postergar el inicio de un debate, ante el desistimiento de la defensa particular y el nombramiento de la defensa pública para poder avanzar en el juicio.

No obstante, el proceso pudo dar un paso adelante cuando las partes acordaron la incorporación del relato de la víctima, sobre cómo ocurrieron los hechos investigados. 

Los jueces, además de reprogramar la audiencia para el próximo viernes, notificaron lo ocurrido al tribunal de ética del Colegio de Abogados, para que evalúe el comportamiento del defensor Jorge Pschunder.

Sandro Fabián Bonnefoi y Martín Seguel son acusados por un violento atraco a una pollería, hecho ocurrido en febrero de 2020.

En el comercio de la calle Morales al 1000 se presentaron Bonnefoi y Seguel, junto a un tercer asaltante, a bordo de una motocicleta y compraron una botella de cerveza, indicando que la tomarían fuera del local y luego regresarían a devolver el envase.

Minutos más tarde, después de las nueve de la noche, cuando ya no había otros clientes ni personas por el lugar, ingresaron al local y mientras uno de los asaltantes le apoyaba un arma blanca en la espalda al titular del comercio y lo reducía, otro de los involucrados se desplazó hacia la caja registradora, apoderándose de todo el dinero allí guardado.

En un movimiento desesperado de la víctima por zafarse del individuo que lo reducía, se produjo un forcejeo en el que el damnificado sufrió un corte en una de sus manos y manchó con sangre las prendas de los asaltantes.

Ese elemento fue determinante para esclarecer, al menos hasta esta instancia, el hecho. Los asaltantes abordaron la motocicleta y se marcharon con la recaudación del día, unos dos mil seiscientos pesos.

Bonnefoi y Seguel fueron imputados por el delito de robo calificado por su comisión con arma blanca y por haber sido perpetrado en un lugar poblado y en banda.