El juez de Garantías Juan Martín Arroyo, dispuso el sobreseimiento de un sujeto que era investigado por el presunto abuso sexual cometido contra su hija. Lo hizo luego de que la fiscalía instara el sobreseimiento por falta de pruebas, pese a la oposición tardía de la querella, que con un cambio de asesoramiento letrado, poco pudo hacer para mantener la causa abierta.

Por tratarse de un caso de abuso sexual intrafamiliar, la información a la que pudo acceder El Cordillerano fue escasa, ya que las partes se pronunciaron con profunda cautela.

Según se describió, se trató de un caso muy complejo en el que se investigó una presunta violencia sexual de parte de un padre a su hija. Pero en una audiencia desarrollada este martes, la fiscalía instó el sobreseimiento y aseguró que no logró recolectar elementos suficientes para sostener la acusación y pedir que el caso avance a una siguiente instancia.

La parte denunciante, cambió a último momento su asesoría letrada e intentó sostener el caso abierto aunque de manera tardía, ya que según las fuentes consultadas, habían operado los plazos para que el caso cierre definitivamente.

En ese sentido el nuevo abogado querellante realizó una serie de planteos intentando sostener el caso abierto e inclusive ante el retiro de la acusación por parte de la fiscalía esperaban poder impulsar el proceso con una querella autónoma, pero las peticiones realizadas por el nuevo abogado de la familia de la víctima, resultaron rechazadas.

Así, el juez Arroyo dispuso el sobreseimiento del acusado y aunque la querella evalúa posibles apelaciones, tal como pudo saber El Cordillerano, las peticiones no tendrían posibilidades de prosperar.