Sobre una colina de la pequeña ciudad sureña de Encantado, en Río Grande del Sur, la cabeza y los brazos extendidos de un enorme monumento a Cristo se imponen sobre el horizonte de Brasil.

Es una nueva estatua llamada Cristo Protector, que con sus 43 metros de altura sobre su pedestal superará en altura al icónico Cristo Redentor de Río de Janeiro, de 38 metros de altura.

Eso la convertirá en la tercera estatua de Jesús más alta del mundo.

Esta semana le agregaron la cabeza y los brazos extendidos a la estructura, que se empezó a construir en 2019.

La idea de hacer este enorme monumento fue del político Adroaldo Conzatti, quien murió en marzo con covid-19, y ha sido financiado con donaciones de particulares y empresas.

Se espera que el proyecto, que costó US$350.000, se complete a lo largo de este año, dijo el grupo Asociación de Amigos de Cristo, encargado de la gestión.

La estatua mide 36 metros de largo (de mano a mano). Un ascensor interno llevará a los turistas a un mirador ubicado en la región del pecho, a 40 metros de altura.