Luego de un año de no asistencia a las aulas, no ha sido simple retomar esa presencialidad pero poco a poco, el sistema y la comunidad educativa se van adecuando a la nueva normalidad.

Patricia Lande, secretaria general de UnTER Bariloche, habló de lo que significó “fue bastante compleja la organización debido a que no estaban las condiciones para el regreso de los compañeros y alumnos y de hecho algunas escuelas todavía no están listas”.

Otra complicación fueron las asambleas de cargos, “demandó muchos días y se fue acomodando con el tiempo porque hubo que organizar toda la vida institucional tanto en horarios como en los grupos”.

Afirmó “se está trabajando muchísimo, esperábamos esta presencialidad más allá de la preocupación  por la gran cantidad de casos que ha tenido Bariloche y sabíamos que también íbamos a tener contagios dentro de las escuelas”.

Ya el año pasado sin asistir a las aulas, fueron varios los docentes con COVID, “van a seguir habiendo pero la idea es que se cumplan a rajatabla los protocolos para que se eviten los contactos y bajen los contagios en el ámbito educativo”.

Al hablar del estado de los edificios escolares dijo “en teoría hoy se iban a entregar los de las ESRN N° 44 y 33 que estaban en obra, los nuevos también como el CET N° 28 tiene algunas cuestiones para terminar”. De este último se refirió al cerramiento de la obra que está judicializada. “El jardín nuevo tiene la conexión en la puerta pero falta terminar por parte de la empresa y hay muchas escuelas que tienen cuestiones por resolver a nivel edilicio”.

Respecto a estos asuntos el diálogo directo lo tiene UnTER Central, “es quien se sienta en la Mesa de Negociaciones y el año pasado hubo mucho cortocircuito al principio con el tema salarial”.

Finalmente luego de una medida de fuerza se pudo retomar ese diálogo “se aprobó una medida salarial que en Bariloche no estábamos de acuerdo pero en la votación provincial que es mayoría sí se hizo”. Ahora se está trabajando en la mejora del protocolo “hay cuestiones para retocar así que la relación con el gobierno provincial tiene idas y vueltas”, afirmó.

Hay varios puntos que aún despiertan preocupación desde la Unión de Trabajadores de la Educación de Río Negro: “enviamos una nota al Ministerio reclamando el refrigerio, estamos haciendo la recorrida de escuelas y jardines y vemos que más allá de que muchas familias tienen la tarjeta Nutre, necesitan algo caliente y para comer a media mañana o media tarde”.

Respetando el protocolo se puede hacer una vianda, algo que no exponga al manoseo de los alimentos o acercamiento excesivo de las personas”. Otro factor que preocupa es la llegada del frío “en muchas escuelas todavía no se reparó el sistema de calefacción, hay calderas rotas”.

Se viven tiempos de educación bimodal y la falta de conexión a internet es un tema primordial “hay un sistema muy deficiente, algunas escuelas tienen dos gigas por eso hay que mejorarlo, proveer las computadoras a alumnos y docentes que más lo necesitan”.

Esto se acentúa en algunos parajes como Corralito o Cerro Alto, “en esos establecimientos es indispensable una buena conectividad, no se usa solo para las clases sino además, para tareas administrativas que son de efectivo cumplimiento y sin embargo no se pueden realizar”.

El sistema de Asambleas de Cargo es otro de los pedidos de modificación urgente “de esta manera se está vulnerando el derecho de trabajo de las y los docentes por fallas del sistema”.

El año pasado fue de manera virtual “creemos que necesita muchísimas mejoras porque hemos visto dificultades en los puntajes de los compañeros, hay cargos que no figuran y se han visto perjudicados en tomar un cargo”. De hecho por estos errores varios se han quedado sin cargo para este 2021.

Susana Alegría