Un sujeto oriundo de Viedma y actualmente radicado en General Conesa había obtenido una suspensión del juicio a prueba en el marco de un expediente por violencia de género. Respetó las pautas impuestas y asistió a un tratamiento psicológico, resultando sobreseído por la extinción de la acción penal que planteó la fiscalía.

En el marco de un expediente judicial de Bariloche, el acusado logró la suspensión del proceso a prueba, luego de enfrentar en junio de 2019 una audiencia de formulación de cargos en la que le atribuyeron el delito de lesiones agravadas por mediar una relación de pareja y un contexto de violencia de género.

Transcurrido el año que se estableció de suspensión, la fiscalía se presentó ante el juez Juan Pablo Laurence para reclamar el sobreseimiento por extinción de la acción penal, tras verificar que el acusado había dado cumplimiento a las reglas de conductas impuestas y no había cometido nuevos delitos.

A.A.M., tal como publicó el Poder Judicial en la sentencia difundida a través de la página web oficial, accedió a la suspensión del proceso en diciembre de 2019, tras ser imputado por un hecho ocurrido el 2 de junio de 2019 en horas de la madrugada.

En la ocasión, en el interior del domicilio que la pareja compartía, el acusado agredió verbalmente a su cónyuge y, tras ello, comenzó a aplicarle puñetazos en el rostro, todo frente a los ojos de la pequeña hija de ambos, de apenas dos años y cinco meses.

Mientras la agresión del sujeto iba en aumento, los gritos despertaron a otra hija de la mujer, de trece años, que dormía en una habitación contigua. La niña acudió en auxilio de su madre, pero no pudo evitar que la violencia desplegada por el sujeto prosiguiera.

La fiscalía había definido que mientras la mujer intentaba refugiarse en el comedor de la vivienda y se protegía agachada o en cuclillas, el agresor le aplicó puñetazos y patadas en la cabeza y en la cara.

A raíz del accionar descripto, la víctima sufrió diversas lesiones de carácter leves que fueron acreditadas por la médica policial.

En el marco de la suspensión del proceso, las partes acordaron que el sujeto debía someterse a un tratamiento psicológico, además de respetar pautas de conducta y ofrecer una reparación económica a modo de compensación por los daños ocasionados.

De tal manera, ante el cumplimiento total de las reglas impuestas en la “probation”, la fiscalía pidió que se declare el sobreseimiento, postura a la que, por supuesto, adhirió la defensa.

“Así las cosas, siendo la representante del Ministerio Público Fiscal el titular de la acción penal pública y de acuerdo a la información de calidad que se brindara en audiencia con la que debe analizarse la información aportada por las partes, corresponde hacer lugar a lo peticionado respecto del imputado, por considerar su dictamen debidamente y legalmente fundado en cuanto a las circunstancias de hecho y de derecho invocadas, contando con la conformidad expresa de parte de la defensa”, sostuvo el magistrado al dictar el sobreseimiento definitivo.

*Si vos o alguna mujer que conocés sufre violencia de género, podés llamar a la Línea 144, que brinda atención telefónica, anónima y gratuita, a mujeres víctimas de violencia de género.