“Nos usaron para decir que son fuertes y que hay que tenerles miedo”

Ricardo Cittadini, cura de la parroquia Nuestra Señora de Luján que fue tomada el viernes en la vecina localidad de El Bolsón, se está reponiendo poco a poco de los golpes que recibió y aseguró que nunca vivió una situación similar.

“He sentido el cariño y la unión de las comunidades de distintas religiones y eso levanta un poco el ánimo” comenzó diciendo. Es oriundo de Buenos Aires, sacerdote desde hace 25 años y en febrero de 2016 llegó a la Comarca.

Vale recordar que el viernes, dos mujeres solicitaron utilizar el baño diciendo que habían llegado de El Maitén, a los pocos minutos ingresaron ocho personas más, encapuchadas.

“No se querían retirar, reclamaban espacios de diálogo y decían que sus derechos son pisoteados, la charla se puso cada vez más dura entonces llamé a Ariel, un franciscano que estaba en otro sector”, relató.

Muy apenado el padre Ricardo dijo “es de cobardes tirar la piedra y esconder la mano pero es la metodología de quienes quieren impunidad”.  En un momento sintió un golpe muy fuerte en la cabeza.

Al franciscano lo tomaron de rehén y durante una hora y media realizaron todos los destrozos en el interior de la iglesia, “mancharon la bandera, tiraron las imágenes al piso pero estaba todo organizado porque la pintura incluso, la llevaron ellos".

Ricardo aseguró que “hicieron todo con una logística impresionante, manejando los medios de comunicación y los tiempos, afuera tenían un grupo de apoyo y aparentemente la periodista que ingresó a pedido de ellos, era parte del grupo”. Agregó “estaban conectados con los medios nacionales y cuando sintieron que habían logrado su cometido se retiraron felices como si hubieran ido a comer una pizza”, describió.

Consultado acerca de cuáles habrían sido las intenciones de los delincuentes dijo “nos usaron a todos para decir que son fuertes y que tenemos que tenerles miedo para que no desalojen a los que están en la toma del Mascardi”.

Esta relación la hace porque a las 14 horas del viernes en Bariloche se realizó la audiencia judicial donde se ratificó el desalojo de Mascardi. “Por eso pienso que la intención era que no avanzara esa situación” aseguró.

 “Con estas acciones están tocando a toda la comunidad de El Bolsón, por eso nos duele más allá de lo eclesial o espiritual, los actos de vandalismo nunca van a ser aceptados”.

Susana Alegría