CINCO AÑOS DE PRISIÓN

| 15/09/2020

Condenaron a un pastor por reiterados abusos sexuales a menores

Mariano Colombo
Condenaron a un pastor por reiterados abusos sexuales a menores

Ángel Mirabal, de 53 años de edad, se declaró culpable y aceptó una condena de cinco años de prisión por varios hechos de abusos cometidos contra dos niñas que visitaban asiduamente su templo y a las que sometió en forma reiterada, en diversos escenarios. Ejercía el culto desde hace casi veinte años y ganó la confianza de familiares de las víctimas.

Los jueces Marcos Burgos, Gregor Joos y Héctor Leguizamón Pondal, homologaron el acuerdo pleno de juicio abreviado y le impusieron al acusado una condena de cinco años de prisión, por reiterados hechos de abuso sexual cometido en perjuicio de dos niñas. El acuerdo fue alcanzado entre el fiscal Tomás Soto, el defensor oficial Marcos Miguel y el propio Mirabal, quien se rindió ante la evidencia reunida en el legajo judicial y aceptó su responsabilidad por los hechos reprochados y la condena propuesta por la fiscalía.

El pastor de la Iglesia de Dios (cristiana pentecostal), de 53 años, estaba acusado por una serie de hechos ocurridos entre los años 2007 y 2010 en relación a una de las víctimas, y en el año 2018 en relación a otra niña.


Los jueces Héctor Leguizamón Pondal, Marcos Burgos y Gregor Joos homologaron el acuerdo de partes. (Foto archivo)

De acuerdo a la acusación que el propio Mirabal reconoció, en fechas y horas que no pudieron ser precisadas con exactitud pero entre el año 2007 y hasta el año 2010, sometió a una pequeña que por entonces transitaba entre sus 6 y 9 años de edad, abusándola sexualmente en reiteradas oportunidades.

Los abusos consistieron en efectuarle tocamientos impúdicos con sus manos en sus partes íntimas, satisfaciendo así sus instintos libidinosos. Según la pieza acusatoria, los hechos ocurrieron en el domicilio particular del pastor, otras veces en el predio de la “Iglesia de Dios”, ubicada en la intersección de las calles Padre Genghini y Vilcapugio y otras veces en el interior del auto particular del imputado.

Según se acreditó mediante la confesión de Mirabal, los hechos ocurrieron con singular frecuencia y de manera reiterada, aprovechando la constante asistencia de familiares de la niña al templo y además el vínculo de confianza que logró establecer con los adultos responsables de la pequeña.

Para perpetrar su execrable conducta, Mirabal se aprovechó también de la autoridad que ejercía sobre la menor y aquellos adultos, en su rol de pastor. Además, para procurar el silencio de la víctima, le entregaba dinero en forma periódica.

En otra porción de la acusación, le atribuyeron a Mirabal un hecho ocurrido en el mes de marzo de 2018 -un viernes por la noche-, en el interior de su domicilio particular, ocasión en que abusó sexualmente de una niña de diez años de edad, que se había quedado a dormir en su casa.

En la ocasión, manoseó a la niña en sus partes íntimas y ante la resistencia de la misma se alejó del lugar. Al día siguiente intentó regalarle a la pequeña un par de patines que aquella rechazó. En ese caso también se aprovechó de la autoridad que ejercía sobre la menor, toda vez que era el pastor de la iglesia donde concurría todo el grupo familiar de la víctima y además que aquella noche estaba bajo su guarda.

Los hechos descriptos encuadraron en las figuras de abuso sexual reiterado y agravado por haber sido cometido contra dos menores de trece años de edad, en su calidad de ministro de un culto religioso y encargado de la guarda -dos hechos.

*Si vos o alguna mujer que conocés sufre violencia de género, podés llamar a la Línea 144, que brinda atención telefónica a mujeres víctimas de violencia de género durante las 24 horas, los 365 días del año. Es anónima, gratuita y nacional.

Mariano Colombo

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