07/08/2020

Investigan cómo las ovejas podrían controlar la invasión de pinos

Daniel Pardo
Investigan cómo las ovejas podrían controlar la invasión de pinos

 

El trabajo realizado por investigadoras de INIBIOMA fue publicado en una reconocida revista científica. “Pudimos obtener resultados que podrían ser muy útiles para los productores de la zona”, señaló una de las responsables del trabajo, Lucía Zamora.

Una investigación liderada por la Dra. Lucía Zamora y Dra. Romina Dimarco del Instituto de Investigaciones en Biodiversidad y Medioambiente (CONICET – Universidad Nacional del Comahue) fue publicada en la revista científica Scientific Reports. El trabajo analiza las preferencias de la alimentación de las ovejas por diferentes especies de pinos, algunos más invasores que otros. Los resultados podrían contribuir al manejo de invasiones de pinos en la Patagonia.

Lucía es becaria posdoctoral de INIBOMA y señaló que el trabajo fue parte de su proyecto de doctorado que se inició en 2014. “El disparador fue a partir de mis directores que ya venían trabajando con las plantas exóticas e invasoras en la zona”, contó en el programa GPS de El Cordillerano Radio (93.7). El desarrollo de la investigación demandó 5 años de trabajo.

Lucía explicó que las especies exóticas invasoras pueden generar grandes problemas económicos, sociales y para los ecosistemas. Por eso, encontrar formas efectivas de control significa un gran desafío.

“Se sabe que los herbívoros como el ciervo, la vaca o las ovejas pueden afectar a las comunidades de plantas. Por ejemplo, pueden promover o frenar la dispersión de algunas especies”, señaló y agregó que, si a la oveja le gusta más comer una especie invasora que otra no invasora, es probable que la especie invasora sea comida en mayor medida y no se disperse tanto como las menos preferidas.

La investigadora señaló que las ovejas pueden preferir algunas especies de plantas sobre otras por los compuestos químicos de las plantas y sus características físicas. “Eso puede explicar en parte esta preferencia entre especies, como cuando nosotros nos vemos más atraídos hacia un mousse de chocolate que hacia la mostaza”, ejemplificó y agregó que también se consideró el comportamiento al comer porque el ambiente en el que se encuentran puede influenciar en las preferencias de los herbívoros.

“En este proyecto buscamos testear esta idea con un grupo de plantas muy problemáticas en la Patagonia y en general en todo el hemisferio sur, los pinos”, señaló Lucía y comentó que estas especies fueron plantadas en todo el mundo principalmente para la obtención de madera o pulpa para papel. “Lo bueno que tienen es que crecen muy rápido, lo malo es que se dispersan muy rápido también, muchas veces sobre áreas donde no queremos que estén, como las zonas que estaban destinadas para pastura para el ganado.

Lucía contó trabajaron con ovejas, “el herbívoro doméstico más común en la zona y con plantas de pino menores a dos años con experimentos totalmente controlados”. Contó que primero testearon cuál era el daño que provocaban distintas cargas ganaderas de ovejas sobre las plantas de pino. Luego, presentaron diferentes especies de pino a las ovejas y observaron cuál prefería comer. Y, por último, testearon cuánto dañaba a la especie más problemática en la zona y en el mundo –el pino contorta o murrayana- en dos ambientes, la estepa y los matorrales abiertos.

“Estos experimentos fueron bastante más intensos de lo planeado”, reconoció y apuntó que las ovejas aman saltar las cercas que habían puesto. “Parecían más bien cabras que ovejas”, comentó entre risas. Destacó también la ayuda logística de la gente de la estancia Fortín Chacabuco y a la organización “The Nature Conservancy”.

“Pudimos obtener resultados que podrían ser muy útiles para los productores de la zona”, señaló y explicó que observaron que cargas ganaderas medianas a altas, “en poco tiempo -4 o 5 días- concentradas en zonas donde hay invasión temprana de pinos puede controlar la regeneración”. También observó que las ovejas prefieren pinos con tejidos más blandos, alto contenido de agua y bajo contenido de un compuesto químico en particular (?-pineno). “Y que cuando están en ambientes de matorral abierto dañan más a cada plantita que cuando están en pastizales de estepa”.

En base a estos resultados, “pensamos que realizar un manejo rotativo del ganado, teniendo en cuenta colocar altas cargas, pocos días al menos una vez al año en zonas cercanas a plantaciones podría ser una herramienta útil para frenar la invasión”. Es común, señaló Lucía, que en los campos se desarrolle simultáneamente la producción forestal y ganadera, es decir que es una herramienta potencialmente aplicable en muchos lugares donde la invasión genera importantes problemas.

 

5 años de trabajo

El proyecto fue financiado por CONICET y la ANPCyT.

Se realizó entre 2014 y 2019. Hay 3 publicaciones en revistas científicas, una por experimento/pregunta. Las revistas son: Biological Invasions, Austral Ecology y este último en Scientific Reports.

Integrantes del proyecto: Dra. Lucía Zamora, Dr. Martin Nuñez y Dra. Andrea Relva, los tres de INIBIOMA – CONICET y Dra. Romina Dimarco de INTA-CONICET.

Daniel Pardo

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