Malestar en natatorios y gimnasios por las últimas disposiciones de la Municipalidad

A partir de este lunes no puede haber circulación después de las 19 horas en todo San Carlos de Bariloche y Dina Huapi. La medida también alcanza a los gimnasios y natatorios, quienes deben cerrar en ese horario (18 hs.). Ante tal situación fue mucho el malestar de los propietarios, quienes entienden que la situación los perjudica debido al horario de cierre. Hablaron de “falta de criterio” para elaborar la resolución y se mostraron inconformes con la resolución que entró en vigencia esta semana.

Consultado por El Cordillerano, Pablo Tomassone, del natatorio Campo D’Aqcua, indicó que la medida “nos afectó muchísimo. Es algo que nadie esperaba, sobre todo porque veníamos trabajando bien con los preventores del municipio. Teníamos la situación controlada” comenzó. “Lo que creemos es que hay una falta de criterio para aplicar la medida. Sabemos que los contagios en la ciudad se dan por las reuniones no porque la gente haga actividad física” indicó.

La pileta tiene la mayor cantidad de gente entre semana en los horarios de la noche, cuando cierran los comercios. En ese sentido Tomassone indicó que “la medida ataca un foco donde está la problemática. La gente sale de trabajar y va a la pileta. En ese sentido la medida nos perjudica. No es justo, porque los preventores saben cuál es nuestro panorama. Los clientes lo tomaron a mal porque les cortan la posibilidad de hacer actividad”.

Además afirmó que en Campo D’Aqcua “ahora hay varios profesores que se quedaron sin horas para trabajar”. Según contó venían trabajando a un buen ritmo con los diferentes protocolos. “Están cortando algo que de a poco empezaba a producir” sintetizó.

Por último, Tomassone hizo hincapié en la parte financiera. “Es imposible mantener una estructura así; agua caliente, luz, profesores y demás; con tan solo dos horas productivas. No podemos abrir en los momentos que más gente venía a nadar” finalizó.

Por su parte los gimnasios también han tenido que cambiar la situación en base a las medidas tomadas por el municipio. Gastón Vuodo, preparador físico y entrenador personal, le contó a El Cordillerano sobre esos cambios y la dificultad que genera sobre todo cambiar de horarios a los diferentes clientes. “Cuesta pasarlos de la tarde a la mañana, no todos pueden. Además hay que tener en cuenta que la mayoría de los comercios terminan a las 18 horas, en el mismo momento que nosotros. Ahora no van a poder hacer actividad” contó.

Más allá de los problemas que generan las nuevas disposiciones, según indicó Vuodo “la mayoría de la gente entiende el panorama, porque sabe que no es responsabilidad de uno”. Aunque el cambio de horario y disposiciones genera que queden clientes sin posibilidad de realizar actividad física.

“Hay gente que trabaja desde las 9 hasta las 18 horas y no pueden venir a entrenar. Es pérdida económica para nosotros y entrenamiento para ellos que venían con un ritmo. La situación es compleja” sostuvo. Por último se esperanzó en que sean solo dos semanas con estas nuevas modalidades.

David Argel