“El mayor problema es la incertidumbre que origina la pandemia”

Los miedos en el marco de una cuarentena muy extensa y la salud mental de las personas son algunas de las temáticas que abordó la psicóloga Cibel de Andreis. “Han crecido los casos de ansiedad, los casos de violencia doméstica, de angustia, depresión”, con el aislamiento y la aparición del COVID-19.

Dijo que “muchas veces se toman decisiones impulsivas que afecta no solo a un individuo, si o a todo su entorno, la violencia doméstica ha crecido, hay crisis de angustia que terminan con efectos más serios y también se ha visto un gran crecimiento en cuanto a crisis emocionales”. Las declaraciones las realizó Cibel a través del programa “Mano y contramano” que se emite de lunes a viernes de 15 a 17 por El Cordillerano Radio (93.7).

Justamente sobre el tema violencia la profesional escribió en su blog un artículo titulado: “Violencia es violencia, siempre” y allí sostiene que “hablar de violencia, resulta en todas las ocasiones un tema sensible. Quienes la ejercen pretenden negarla o pormenorizarla y quienes la han padecido o la padecen prefieren no participar ya sea por temor, por no querer ver, por vergüenza, falta de información, etcétera. Hay quienes se indignan, otros que toman una postura más activa y se involucran para tratar de ayudar a las víctimas desde distintos órdenes (salud, judicial, contención, etcétera) y quienes con actitudes combativas y violentas quieren demostrar su apoyo a la gran cantidad de víctimas, sin darse cuenta que, su modo de proceder parece alentar la agresividad como medio de resolución de conflictos”.

Al respecto Cibel de Andreis consideró que “se deben tomar actitudes y actividades positivas, hay muchas situaciones que resolver” y agregó que “hay que tener mucho cuidado cuando recibimos información sobre el coronavirus, siempre hay que tomar la palabra oficial, porque la realidad es que tenemos que convivir con el virus y tomar la responsabilidad de cuidarnos, yo, para cuidar al otro”.

Aclaró que “muchos de nosotros no somos población de riesgo, pero nos tenemos que cuidar para no contagiar a otros, ahí es donde tenemos que apelar al sentido de responsabilidad: yo me cuido, para cuidar”.

Sobre los “ataques” que existieron hacia personas que trabajan en el ámbito de la salud sostuvo que “el ser humano cuando actúa en grupo actúa peor que en forma individual, cuando varios vecinos se juntan y empiezan a hablar, a expandir el miedo entre ellos, empiezan a actuar en manada y entonces cuando vienen en malón es muy difícil de trabajarlo, pero la idea es apelar al sentido de tranquilidad, porque si uno las encaras de manera tranquila seguramente la solución va ser mucho más sencilla para nosotros mismos y para todo el entorno”.

Consideró que “siempre hay que estar en el lugar de otro. Con respecto a los miedos, es mejor consensuar, hablar, buscar el diálogo y no la pelea, no tener miedo de algún contagio, bueno ‘yo te puedo explicar porque no te voy a contagiar’ y de esa manera llegar a una situación consensuada entre las partes, esto en todos los aspectos de la vida no solo por la pandemia”.

¿Cuáles serían los miedos que se manifiestan?, “principalmente esta esto de ser contagiado o contagiar, generalmente hay muchas consultas de personas que tienen a su cuidado población que pueden ser consideradas de riesgo, como mayores o convivir con alguna pareja que esté inmunodeprimida por alguna enfermedad o hijos con asma, esas son las personas que han consultado más. También personas que tienen que salir a trabajar, con necesidades básicas y pensaban si eso no les podía ocasionar contagio”.

Es evidente que con esto de la cuarentena y la pandemia “hay una nueva realidad en donde es necesario poner pautas de una nueva convivencia, se convive mucho más tiempo en familia, con los chicos, con la pareja, ya son más de 130 días en casa, entonces hay que consensuar, quién usa la compu y cuándo, en que momento tenemos momentos de reflexión en las habitaciones para estar relajados, ir aprendiendo a convivir todo el día”.

Consultada sobre los adolescentes indicó que “el problema más grande que tenemos, desde los más pequeños a los adolescentes es la incertidumbre, es el no saber, acá no se puede dar una respuesta sobre qué es lo que va a pasar, afecta mucho no saber cuánto dura esto y en los adolescentes es muy difícil manejar los tiempos, ellos ya tienen más autonomía, salían y de repente eso no lo tienen más y no se sabe hasta cuándo, allí hay que dejar en claro que, aunque no sabemos, esto es por ahora”.

La profesional mencionó también que “al principio el miedo era a contagiarse, ya ahora preocupa la economía, cómo voy a sostener a mi familia, emocionalmente cómo hago entender a mis hijos, y una de las preocupaciones más grandes es el índice de cómo están los abuelitos, porque no son visitados. Es muy difícil para una persona de la tercer a edad que ya tiene coartada muchas libertades por su salud. Si a eso le agregamos que hoy los tenemos súper aterrorizados con esto que no pueden salir porque pueden ser contagiados, que los nietos no pueden ir a verlos porque los pueden contagiar, se genera una crisis emocional muy grande. Hay que tratar de ayudar a los abuelitos con la tecnología para que puedan estar conectados”.

Por último, la profesional recomendó “sensibilidad, orden, rutinas, no compensar angustia con comidas, ordenarnos, acostarnos temprano, leer un libro, levantarse como muy tarde a las 9, desayunar todos juntos, tener momentos juntos, respetar los momentos del otro y sobre todo fomentar el orden, eso siempre ayuda a encarar mejor la situación. Mantener la estructura ayuda y ayuda muchísimo tratar de estar lo más tranquilo posible”.

La profesional trabaja por su cuenta en un grupo privado de adicciones junto a un psiquiatra y en otro de cirugía bariátrica “del cual soy socia junto con el médico cirujano, la médica clínica y la nutricionista con los cuales conformamos un equipo multidisciplinario que se llama Cirugía de Obesidad de Bariloche”, indicó e informó que se la puede contactar en psicologiacibel.blogspot.com - @psicologiacibel en facebook y #psicologiacibel.

Información para acabar con la violencia

Muchos hemos padecido hechos de violencia sin siquiera habernos dado cuenta sino hasta más adelante en la vida. Es por eso que hoy se considera a la información como una de las muchas estrategias para acabar con la violencia en todas sus formas.

“’Conocimiento es poder’ decía la canción de una serie animada que miraba en mi infancia, y efectivamente así es. El reconocer que lo que me sucede no es correcto, ni esperable, el comprender que las personas violentas difícilmente lograrán una mejora en el control de sus impulsos sin asistencia profesional, el dar a conocer dónde y cómo se pueden denunciar actos de violencia como medio para hacer ver al agresor que su conducta es inadmisible, el saber con qué medios cuento para preservar mi vida y la de mis seres queridos; sin duda es de gran ayuda a la hora de decidir poner fin a hechos violentos”, explicó Cibel.

Conceptos violentos

Violencia implica todo hecho de agresión física, emocional, patrimonial, sexual o verbal.

Psicológica: Son aquellos actos en los que no median las agresiones físicas, sino todo tipo de verbalizaciones que atentan contra la integridad psicoemocional de otro individuo (como por ejemplo comentarios peyorativos, repetir una y otra vez que uno es un inútil, inservible, que no sabe hacer nada bien, que nadie lo quiere, etcétera.)

Física: Actos de ejercicio de fuerza física o con objetos que pueden producir lesiones graves y hasta la muerte, dirigidos a uno o más individuos (por ejemplo, golpes de puños o patadas, empujar, tirar de los pelos, forcejeos, utilizar elementos como cigarrillos encendidos, palos, armas de fuego o armas blancas, etcétera).

Sexual: todos aquellos actos de índole sexual con o sin contacto genital que no haya sido consensuado por las partes involucradas. Incluyen actos de explotación sexual, trata de personas, violación, abuso, acoso, etcétera.

Económica: vulneración sobre los derechos para acceder a bienes materiales o dinero ya sea por medio de sustracción, destrucción de patrimonio, retención de bienes o herramientas de trabajo o documentación (por ejemplo, privar a la persona de su documento de identidad o retener su salario o las tarjetas por medio del cual lo cobra, no permitirle salir a trabajar, romper el teléfono o elementos de aprecio, etcétera)

Simbólica: Todo tipo de simbología que implique superioridad del victimario sobre la víctima (mensajes, símbolos, mitos, imágenes que indiquen roles sociales o culturales en los que tácita o explícitamente se implica lo que se espera de cada género y la subordinación de uno de ellos)

Según la modalidad

Política o institucional: todo medio de violencia utilizado por parte de actores políticos (como figura única o partido político) o representantes del Estado sobre la ciudadanía, vulnerando sus derechos a la integridad, la vida, la justicia, etcétera. (Por ejemplo, actos de violencia policial, golpes de estado, terrorismo de estado, etcétera).

Laboral: o también conocido como mobbing, implica todo tipo de violencia ejercida en el ámbito laboral independientemente de la jerarquía. Si proviene de un superior, también se llama abuso de poder.

Doméstica, intrafamiliar, familiar: violencia padecida dentro del entorno familiar. Puede incluir no solo a parejas, sino padres contra hijos, hijos contra padres, abuelos, tíos, etcétera. Se estima que del 100% de los casos de violencia doméstica, el 60% es ejercido por el padre contra la mujer y sus hijos y el 40% es ejercida por la mujer hacia su pareja e hijos, variando entre ellos los medios utilizados para ejercer violencia.

De género: todo tipo de violencia ejercida hacia el género femenino y miembros de la comunidad LGBT. La violencia de género ha cobrado mayor relevancia dado que es una de las formas de violencia que más fatalidades causa y si bien se ha avanzado grandemente en proveer asistencia a las víctimas, como números de teléfono gratuitos, campañas de difusión, comisarías de la mujer, casas de acogida, etcétera, los casos terminados en fatalidades aún generan cifras alarmantes.

Obstétrica: es el tipo de violencia ejercida por parte de las instituciones de salud sobre la mujer durante el embarazo, el parto y el post parto (por ejemplo, negación de servicios, humillaciones verbales, negación del dolor experimentado por la parturienta, intervenciones médicas no indicadas, etcétera).

Racial: todo tipo de violencia ejercida sobre un individuo basado en su origen étnico o racial.Bullying y ciberbullying: todo tipo de violencia física o psicológica en el ámbito escolar entre compañeros. Ciberbullying hace referencia al acoso de este mismo tipo; muchas veces potenciado por el anonimato alcanzado por medio de internet o redes sociales.

“Como verás, hay muchas formas de violentar y ser violentados. Si conoces a alguien que esté lidiando con este tipo de dificultades puedes alentarlo a buscar ayuda profesional. Las cosas pueden mejorar. Para contactarme puedes escribirme un mail presionando aquí o enviarme un WhatsApp al +5492944600692”, señaló Cibel.