Discotecas de Bariloche, el Luna Park y el Centro Cultural Konex se unen para enfrentar la crisis

La empresa de Bariloche forma parte de una cámara conformada recientemente, de la que participan el emblemático escenario porteño y el prestigioso Centro Cultural Konex. La nueva entidad cuenta con unas 3.000 empresas.

Unas 3.000 pymes de todo el país vinculadas al entretenimiento, desde el Luna Park y el Centro Cultural Konex hasta las históricas discotecas de Bariloche (ByPass, Cerebro, Genux y Rocket) se unieron para buscar una salida conjunta ante la crisis que el coronavirus está causando en la industria, una de las más afectadas por la cuarentena en todo el país.

Los establecimientos conformaron la Industria del Entretenimiento Argentino (IDEAr), una entidad con la que intentan acordar con el Gobierno protocolos para volver a la actividad.

En la primera asamblea virtual de IDEAr participaron dueños de discotecas, teatros y centros de entretenimientos de todo el país. Los nombres son conocidos: el Luna Park, Arena Maipú, Mandarine Park, Estadio Hípico, La Fábrica, Pueblo Límite, La Trastienda, Casa Babylon, CC Konex, Auditorio Oeste, Crobar, Niceto Club, XLR, Jet, Vorterix, El Bosque, Groove, The Bow, Zebra, La City, La Boite, BNN, Casa de Piedra, Switch, Rose in Rio, entre otros.

"El sector emplea hoy a lo largo y ancho de todo el país y en sus distintos segmentos, en forma directa e indirecta, a 500.000 personas. Sumadas las industrias asociadas y transversales, el número asciende a cerca de un millón de familias", indicó IDEAr en un comunicado.

El Ministerio de Cultura convocó a IDEAr y otras asociaciones empresarias a una mesa multisectorial en la que se activen protocolos que permitan abrir los locales "de manera segura y responsable".

Además, la organización empresaria busca reunirse con el jefe de Gabinete Cafiero y el ministro de Desarrollo Productivo, Matías Kulfas
“El universo de gente que participa de actividades en nuestra industria es enorme. Y no solo es público joven, es de todas las edades. El desafío de encontrar soluciones y estar cerca de toda esa población es muy relevante para todos nosotros”, dijo Eduardo Sempé, que tiene la concesión del estadio Malvinas Argentinas.

"La pandemia y las dificultades que atraviesa el sector fueron el disparador para poder juntarnos a pensar qué industria queremos y cómo vamos a trabajar en el futuro", dijo Ariel Gambini, dueño de Mute Argentina y socio fundador de IDEAr.

"El turismo y la cultura se retroalimentan. La movilización de espectadores para disfrutar una actividad cultural repercute, por ejemplo, en la ocupación hotelera, servicios de gastronomía, transportes y hasta mano de obra local, entre muchos otros sectores”, agregó Ricardo “Pochi” Rimoldi, dueño de las discotecas By Pass y Cerebro en Bariloche, emblemáticas en la organización de viajes de egresados.
(Fuente: Altavoz Comunicación)