Jorge “Flaco” Vivaldo: “me gustaría dirigir un equipo de Primera A”

El histórico arquero del fútbol argentino y actual director técnico de Villa San Carlos (Primera B Metropolitana) dialogó con “El Cordillerano entrena”, en una charla extendida acerca de su carrera y su presente.

“Chacarita es mi club. Mi paso ha sido importante. Llegué en la temporada 98-99, después de mucho tiempo en la “B” Nacional. Nos fue muy bien, pudimos estar mucho tiempo en Primera División y lograr cosas importantes como ganarle a Boca y a River, cosas que estaban en el olvido. Cuando volví de la lesión me fui a Olimpo y en “Chaca” quedó el ‘Mono’ Navarro Montoya” inició el ex “Funebrero”.

Además el “Flaco” contó cuando estuvo a punto de jugar en Boca Juniors, pero el pase se vio frustrado. “Fue en el 2004 cuando estaba en Olimpo de Bahía Blanca. Terminó el último partido y tenía ganas de radicarme con la familia en Bahía. Me llamó el ayudante de campo de Carlos Bianchi justo cuando Boca tenía que ir a jugar la final de la Copa Libertadores a

Colombia contra Once Caldas (Manizales). Me dijo que Bianchi quería hablar conmigo porque me quería llevar a la pretemporada, hablé esa noche con él (con Bianchi) y me dijo que quería que me presente a la semana siguiente. Justo esa final Boca la perdió por penales y el domingo se terminó yendo Bianchi. Eso hizo que mi transferencia se caiga también. Llegó otro entrenador con otro arquero” recordó.

El “Flaco” cuando defendía los tres palos.

Además relató la forma en particular en que él conoció la noticia. “Fue duro aparte porque me enteré en un programa de televisión. Los dirigentes me dijeron que iba a viajar igual a hacer la pretemporada y de hecho hice todos los trámites. Los supe en vivo en el programa al que me invitaron que lo conducía Marcelo Palacios. En el aire agradecí, pero fue duro. A mis 37 años con bastante experiencia y en un gran momento de mi carrera. Olimpo había contratado otro arquero, y mi pase lo tenía Chacarita que estaba en la “B”, donde tuve que volver. Fue un año muy duro ese, porque estuve sin cobrar por varios meses y sin jugar. Había un tema político complicado” rememoró.

Más allá de ese mal tiempo, Vivaldo tuvo un cierre de ese año para el recuerdo en el “Funebrero”. “Jugamos un desempate con Defensores de Belgrano para no descender. El arquero titular se lesionó y me tocó jugar a mí. Fuimos a penales y atajé tres. Por eso la gente de ‘Chaca’ me quiere tanto” indicó.

Además el “Flaco” contó acerca de sus anhelos y sueños. “Estamos muy bien posicionados con el club para clasificar al reducido para ascender a la Primera “B” Nacional, es algo que me gustaría. Personalmente me gustaría algún día poder dirigir algún equipo de la Primera “A”. Además me gustaría volver a tener una experiencia en el exterior. Cuando me fui me encantó y la verdad que es más por lo deportivo que por lo económico. Soy de las personas que intenta disfrutar el día a día. Mis hijos son mis dos bendiciones. Estoy feliz” sintetizó.

Vivaldo también relató su comienzo “tardío” en el fútbol. “Entre los 15 y los 20 años dejé de jugar. Cuando mis padres se separaron empecé a trabajar. De Avellaneda me mude a Sarandí y me probé en Arsenal con 20 años. A partir de ahí comenzó mi carrera. Siempre fui detrás de un sueño pero nunca fui un iluso. Me puse metas cortas para poder cumplirlas. Lo más difícil de bancar entre el sueño y que se cumpla es el proceso. Eso es lo más importante, enamorarse del proceso” sostuvo.

Además eligió los mejores momentos de su vida deportiva y personal. “Cada ascenso fue importante, como jugador y entrenador. Es lindo por el grupo y lo que se genera. Personalmente cuando nacieron mis dos hijos” contó.

Por último, Vivaldo dejó un par de consejos para quienes recién comienzan. “Lo más importante es tener pasión por lo que se hace. Donde no hay pasión no hay sacrificio. Para mí no era problema perderme un cumpleaños o una fiesta por jugar al fútbol. Yo amaba jugar. Y sentía que no me perdía las cosas, sino que elegí hacer otras. Tuve suerte y me aferré con uñas y dientes, lo di todo. Si me puedo jactar de algo es que fui un gran profesional, siempre me gustó entrenar, cuidarme, estar bien. Creo que uno tiene que enfocarse donde está la pasión” finalizó.

David Argel