Jóvenes estudiantes hicieron llegar donación a 23 familias de Villa Llanquín

Adolescentes que integran cuatro centros de estudiantes de nuestra ciudad motivados ante las necesidades, realizaron una campaña de alimentos para colaborar con 23 familias de Villa Llanquín.

Participaron integrantes de los Centros de Estudiantes de La Semilla, ESRN Nº 44, CET N° 2 y ESRN N°2. Uno de ellos, Guillermo Navarro en diálogo con El Cordillerano comentó cómo surgió la idea “comenzamos a ver qué podíamos hacer durante la pandemia, uno de nuestros compañeros tomó contacto con una docente de Villa Llanquín y así tomamos la decisión”.

Supieron así que esa cantidad de familias estaba necesitando ropa de abrigo, calzado y sobre todo alimentos. De cada uno de esos colegios participaron aproximadamente 15 chicos y chicas, “físicamente fuimos muy pocos por una cuestión de respetar el aislamiento” remarcó.

La campaña se denominó “Nadie se salva solo/sola” y la realizaron por medio de las redes sociales “cada uno se lo comentó además a sus amigos y conocidos y la verdad es que juntamos una cantidad impresionante de donaciones” dijo muy feliz.

Con toda esa mercadería armaron 23 módulos alimentarios, diez muy recargados para casos particulares “yerba, fideos, arroz, polenta, verduras, leche, infusiones y muchas cosas más” detalló.

La entrega la hicieron por medio de una docente y de Isabel Salazar, integrante de la Comisión de Fomento de Llanquín, una de las encargadas de distribuir todo lo recibido entre las familias.

Tienen pensado hacer una segunda colecta, para el mismo lugar pero también, para distribuir entre las familias de sus cuatro escuelas que más lo necesiten. “Más allá de las necesidades en Villa Llanquín, sabemos que en Bariloche están atravesando por la misma situación” aclaró.

Para donaciones pueden comunicarse al teléfono +54 9 2944 80-1021 de Antú Villagra. Son muchas las campañas que se vienen llevando a cabo desde que comenzó la pandemia y el aislamiento obligatorio, pero es de resaltar cuando esta clase de iniciativas surge de parte de jóvenes.

Una vez más demuestran el compromiso, comunicándose entre sí, proponiendo ideas y llevándolas adelante en muy poco tiempo. Atentos a las necesidades de un sector con derechos vulnerados de nuestra sociedad, militan socialmente en pos de mejorar un poco la calidad de vida de la gente.

No pueden quedarse quietos ni ajenos, a una realidad muy lamentable, donde las desigualdades salieron a flote en estos momentos tan duros que nos toca atravesar.

Saben que son muchas más las familias que no han recibido ayuda pero dejan demostrado una vez más, que con ejemplos se enseña y se llega al corazón de la gente, apostando a la igualdad y generando acciones que no pasan desapercibidas.

Susana Alegría