Se terminó de dar forma a una red de ayuda a los gastronómicos

En Bariloche se ha dado forma a una Red Solidaria Gastronómica, si bien la idea era previa, con la pandemia la concretaron de manera urgente y según aseguró uno de sus participantes, Jorge Quilaleo, lejos están de tener intenciones de actividad gremial.

Jorge Quilaleo es un referente deportivo, social y comunitario del barrio Lera pero además, pertenece a la familia de los gastronómicos y es una de las caras visibles de dicha iniciativa. “Veníamos realizando una especie de prueba piloto dando una mano a compañeros que necesitaban algo puntual, con herramientas o materiales para que cerraran un poco su hogar”.

Se trata de un acompañamiento social “no lo habíamos profundizado dado que no se había presentado algo tan grave como lo que estamos viviendo a nivel económico y cese de actividades”.

La idea era concreta “pero al analizarla nos encontramos con algunos pormenores a enfrentar, pero creemos que el trabajo en equipo de consolidar un grupo en la unidad y en un objetivo claro poder avanzar”.

Quilaleo quiso dejar en claro algo fundamental “no somos ni queremos mostrarnos como una oposición al gremio ni es nuestra intención cumplir ninguna de sus funciones, solo queremos sumar de manera paralela un granito de arena para todos nuestros compañeros gastronómicos”.

Agregó “no formamos esta red para demostrar que el gremio no está haciendo tal o cual cosa, solo una mano más para que el compañero que se siente angustiado y desolado, pueda empezar a vislumbrar un horizonte”. Siempre respetando los espacios de cada uno y trabajando en equipo, podrán llegar a lograrlo.

“Es momento de volver a generar la dignidad del trabajador, cuando empezamos a ver que en un montón de cosas estamos solos, tenemos que organizarnos para actuar y salir adelante”, detalló.

Al margen de las necesidades inmediatas dijo “la Red Social Dignidad Gastronómica ya está actuando y esa imprescindible terminar de darle forma, con nuevos proyectos y mayor unidad”.

Al ser consultado acerca de un padrón del que se puedan extraer cifras concretas sobre cuántos trabajadores gastronómicos hay en nuestra ciudad dijo “no hay un padrón genuino pero haciendo una cuenta rápida por temporada hay aproximadamente 20 mil compañeros”.

Los estables, los temporarios, los que llegan a nuestra ciudad con un objetivo de ingreso y trabajo a largo plazo y tantos otros que cubren un amplio abanico de posibilidades. “El total es aportante al gremio entonces lo tomamos como trabajadores activos, tengan o no una continuidad”.

Pautas propuestas

Dadas las circunstancias comenzaron a trabajar en base a tres puntos esenciales. Habló del primero de ellos “en la rama gastronómica tenemos todo, no solo se trata de la comida, en un hotel hay conserjes, mucamas, personal de limpieza, mantenimiento, parques y jardines, lavadero, electricidad, entonces el objetivo es ramificar ese potencial de servicio hacia la comunidad”.

Detalló “empezar a ver qué tiene y qué necesita ese compañero o compañera y hacia donde podemos canalizar una ayuda concreta”.

El segundo punto es el tener en resguardo un extra de alimentos, elementos de construcción para las necesidades que vayan surgiendo. Y el tercer punto es una oficialización de ingreso a la red, “se les van a pedir datos para saber con nombre y apellido quienes ingresan a nuestro sistema”.

Ya están trabajando en una base de datos y una página en redes sociales, la que incluirá aquellos adultos mayores que ya se han retirado por la edad de la actividad gastronómica. “Estamos haciendo un llamado a la unidad de todos los compañeros estén en funciones o no y caminar juntos”.

Para el acompañamiento del personal retirado están apostando a la formación de un grupo de jóvenes “es necesario darle un espacio a la nueva generación porque tenemos un potencial enorme”.

Dentro de la red ya vienen recolectando alimentos y distribuyendo en algunos hogares “lo estamos haciendo pero sabemos que esa no es la prioridad porque entendimos que dándole una caja de comida no se resuelven los problemas”.

Como Quilaleo es el director de la Escuela de Taekwondo Hueche del barrio Lera, estas colectas las han articulado con las familias de los alumnos.

“Eso también suma valores humanos muy fuertes en los alumnos y reafirma lo que trato de inculcarles de manera cotidiana” comentó. Él ingresó a la familia gastronómica con tan solo 16 años, cesó durante su servicio militar y luego la retomó, llegando ahora a los 31 años de actividad.

Acompañarse mutuamente para que cada uno pueda posicionarse desde otro lugar, no basados solo en el asistencialismo. “Esta adversidad a muchos nos ha quitado la dignidad por eso vamos a enfrentar un proyecto para que la recuperemos”.

Pedido a empresas y comercios

Continuando con la cadena de la solidaridad hacia los compañeros gastronómicos se están comenzando a contactar con empresas y comercios locales, “no les pedimos que nos donen mercadería o alimentos frescos, solo necesitamos que nos hagan descuentos en la compra”.

Algunos gastronómicos que no cuentan en esta cuarentena con un ingreso de dinero en sus hogares están elaborando pizzas o viandas y vendiéndolas “otros están haciendo servicio de podas o limpieza de terrenos”.

Están comenzando a arreglar algunas viviendas de manera urgente “entonces por ejemplo pedimos un descuento en la compra de los materiales o herramientas que necesitamos en ferreterías o corralones”.

Para finalizar dijo “invitamos a todos los compañeros gastronómicos a que se sumen, para trabajar unidos y alejados totalmente de cualquier clase de enfrentamientos”.

Además, manifestó que le van a pedir al gremio que les ceda un espacio en el edificio de la calle Vilcapugio para poder acumular allí las donaciones.

Aquellos trabajadores y trabajadoras gastronómicas que deseen sumarse a la red pueden comunicarse al teléfono +54 9 294 431-9986.

Susana Alegría