Ahed Tamimi, símbolo de la resistencia palestina

Por José Luis Goin 

La palestina Ahed Tamimi podría ser famosa por su cabellera castaño-rojiza, frondosa y enrulada, pero no es así. A los 11 años enfrentó a soldados israelíes a golpes de puño, preguntando por el paradero de su hermano detenido.

Las imágenes de esta pequeña niña frágil frente a un grupo armado dieron la vuelta al mundo. Sus acciones se fueron reiterando, así como las situaciones humillantes a las que era sometida su familia: requisas nocturnas en su hogar, cacheos, burlas, intimidaciones. Su padre detenido varias veces fue torturado, su madre sufrió una herida en la pierna, un primo fue herido de gravedad en la cabeza, una tía muerta. Una atmosfera de hostilidad, violencia y falta de alternativas.

Estuvo presa ocho meses, donde pasó su cumpleaños número 17, condenada por pegarle a un soldado. Es una de los 1.400 menores juzgados por Tribunales Militares Especiales.

Símbolo de resistencia y de idealismo se la acusa de provocar para lograr repercusión. En un contexto de piedras, balas de goma y gases lacrimógenos no parece ser algo menor.