Saladitas: "Si continúan apoyando las ferias, las autoridades se convierten en cómplices"

Existe un reclamo casi constante de los comerciantes que trabajan “dentro de condiciones legales”, al momento de comparar su comercialización con las llamadas “Saladitas”. Desde la Federación que agrupa al rubro comercial consideran que existe una “competencia desleal” en territorio rionegrino.

Nuevamente las autoridades de la Federación de Entidades Empresarias de Río Negro (FEERN) presentaron sus quejas en forma pública por la “evasión impositiva, comercialización de productos de dudosa procedencia, marcas falsificadas, trabajo ilegal y mercadería adulterada, que son solo algunas de las causas que destruyen al comercio legalmente establecido en Río Negro”. La denuncia se realizó a partir de la instalación de las llamadas “Saladitas” en distintos puntos del territorio provincial.

Aducen desde la empresarial que “el comercio ilegal -las Saladitas- atenta directamente contra el desarrollo local. Las ferias conocidas como Saladitas surgen en distintos puntos de nuestra provincia y esa es una muy mala noticia para los comerciantes rionegrinos”.

Asimismo indican que “la peor noticia sumada a los contratiempos conocidos, vinculados a los muy altos costos de funcionamiento y a otras varias circunstancias negativas que golpean al sector. Este año desde la Federación de

Entidades Empresarias de Río Negro (FEERN) hemos advertido de la presencia de estas ferias en Luis Beltrán, Barda del Medio, Cipolletti y recientemente nos enteramos de la pronta realización de una en la localidad de Chimpay. El comercio rionegrino en general no podía imaginar un cierre de año tan preocupante como el que está pasando”.

Desde la FEERN se preguntan: “¿Hasta cuándo los comerciantes tendrán que soportar la presencia de este flagelo? ¿Hasta cuándo las autoridades pertinentes van a mirar hacia el costado en lugar de apoyar a quienes honestamente invierten en el desarrollo local? ¿Cuánto tiempo más pasará hasta que los gobernantes se dignen a defender a los emprendimientos locales que con sus proyectos no hacen más que apostar al crecimiento de la provincia?”

Analizan que “así podríamos seguir preguntándonos miles de cosas, porque hay muchos interrogantes, pero estamos seguros de que solo hay una respuesta: proteger y defender al comercio local legalmente establecido” y explican que “la situación se ha tornado tan complicada que desde la Federación no podemos dejar de manifestar nuestro rechazo y en este sentido exigimos, una vez más y esperamos que sea la definitiva, la firme actuación de los distintos organismos de control y fiscalización, nacionales, provinciales y municipales, por ello nos ponemos a disposición para evaluar medidas y para confeccionar una ley provincial que regule y supervise estas situaciones, como ya existe en otros lugares del país”.

Anteriores quejas

Anteriormente desde la FEERN manifestaron que “la instalación de una feria conocida como Saladita en la localidad en Barda del Medio -en julio pasado- fue solo el comienzo. Tras varios días de permanencia en un predio de esa localidad, y las reiteradas quejas de los comerciantes locales por la competencia desleal, la feria se levantó. Pero ante la posible llegada de Saladitas a la región, un grupo de comerciantes del Alto Valle (Cámara de Comercio de Cipolletti y la Cámara en formación de Cordero, Barda del Medio y Campo Grande) se reunió con el intendente Gustavo Pita para manifestar su preocupación y plantearle la intención de prohibir su instalación”.

Consideran que en dichos comercios ilegales se produce evasión impositiva, hay mercadería adulterada, existe comercialización de productos de dudosa procedencia con marcas falsificadas y trabajo ilegal, “son sólo algunas de las razones que los comerciantes expusieron como causas que destruyen al comercio local legalmente establecido”, señalan.

Por otra parte la Federación de Entidades Empresarias de Río Negro comparte la inquietud de los empresarios rionegrinos, situación sobre la cual ya se ha expresado en reiteradas oportunidades ante hechos similares.

“Observamos con suma preocupación la instalación de este tipo de ferias y consideramos que es necesario defender el comercio local que diariamente genera puestos de trabajo, paga impuestos y tasas todo el año, y las ganancias quedan en nuestras ciudades”.

Acusan complicidad (textual)

En un manifiesto de la Federación indicaron que: Año tras año, incansablemente reclamamos sin éxito desde la FEERN la firme actuación de los organismos de control y fiscalización correspondientes sobre las Saladitas. Resulta incomprensible y censurable a la vez que cuenten con la autorización y el consentimiento de las autoridades, las que en lugar de ello deberían ponerles freno.

El paso del tiempo sin definiciones no hace más que convertir en cómplices a los responsables de controlar y fiscalizar las ferias. Reiteramos desde la Federación nuestro más enérgico rechazo hacia estas actividades informales, que se distinguen por la comercialización de productos de dudosa procedencia y por no cumplir con las normas vigentes. Es necesario que las autoridades nacionales, provinciales y municipales tomen conciencia de una vez por todas de los efectos negativos del comercio ilegal.

Asimismo, es importante que la gente entienda que al comprar artículos de dudoso origen y legitimidad, sin desearlo, están subvencionando a las mafias que promueven la ilegalidad, e inclusive a los talleres clandestinos existentes, con gente esclavizada, como ya ha sido demostrado.

Desde CAME

En este sentido, desde la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME) se advirtió en agosto último por las consecuencias de la venta ilegal en el país, la cual, según un relevamiento en 500 localidades, acumuló en 2018 120.177 millones de pesos, habiendo dejado de recaudar el Estado, solo de IVA, 25.235 millones de pesos. "De alrededor de 2.000 municipios de la Argentina, la enorme mayoría no tiene Saladitas. Solo ocurre en los municipios donde existe desprotección de la calidad de vida de sus habitantes", expresó el secretario general de CAME, José Alberto Bereciartúa.

Ante una situación que tiene continuidad exigen “igualdad de condiciones y derechos”. Incluso desde la FEERN informaron que la propia gobernadora electa, Arabela Carreras, se hizo eco de la problemática y se comprometió a trabajar en el gobierno provincial para la confección de una reglamentación que normalice el establecimiento de ferias a cielo abierto para facilitar la ubicación de este tipo de emprendimientos en igualdad de condiciones frente a los comercios bien establecidos.

Reconocen desde la empresarial que la actual situación se da en un contexto donde la inflación dispara el precio de la canasta básica de alimentos y los servicios aumentan constantemente, por lo tanto la gente busca comprar a un costo más bajo. “Es por eso que es necesario, no solo regular y fiscalizar el comercio para obtener igualdad de condiciones y derechos, también es preciso tomar medidas tributarias y financieras que ayuden a los empresarios para minimizar el impacto de la actual coyuntura sobre el sector PyME. Con este panorama, la dilatación de los tiempos sólo continuará favoreciendo a aquellos que perjudican al sector”, finalizaron.

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