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Avanzan las obras de remodelación de aeropuerto "Teniente Candelaria"
Distintos sectores turísticos anuncian para esta temporada un récord en arribos de aviones al aeropuerto de Bariloche. Por estos días se realiza una modernización de la estación aérea local que brindaría mayor comodidad, principalmente, a los pasajeros. La tarea incluye la construcción de una tercera manga para embarcar y desembarcar a residentes y turistas.
El aeropuerto de Bariloche siempre es uno de los que figura arriba en el movimiento de aviones y para la próxima temporada invernal la cifra puede constituir un nuevo récord. En vacaciones de invierno -julio y agosto con meses pico- se tiene mucho más tráfico y la plataforma de llegada ya queda chica para el estacionamiento de los equipos aéreos.
Sin duda una nueva manga cubierta para ascenso y descenso de pasajeros constituirá una comodidad, la misma estará ubicada hacia la izquierda del actual edificio si se observa desde la entrada, el desembarco será por donde se encontraba la confitería, la cual será trasladada a la planta baja.
Luego del anuncio de obras que hizo en esta ciudad el propio ministro de Transporte de la Nación, Guillermo Dietrich, semanas atrás, se comenzó con el proyecto y las obras se desarrollan sin detener la actividad diaria. También se construirán nuevas oficinas, nuevos espacios de espera para los pasajeros y reformas de instalaciones para los arribos y partidas de los aviones.
La reforma implica mudar algunas cosas colocadas para un movimiento mucho menor, como el sector de almacenamiento de combustible que se encuentra “cerrando” la plataforma hacia el lado sur, a la izquierda de la terminal mirando desde ella. Según se informó las obras se llevarían a cabo en dos etapas, una para las vacaciones de invierno de este año y otra mucho más grande llevaría un par de años más.
Desde el Ministerio de Transporte se informó que “comenzó la obra de la terminal de pasajeros de Bariloche, uno de las de más afluencia del país. La nueva estación tendrá más capacidad operativa y espacios más amplios, lo que permitirá elevar el nivel de servicio que brinda al millón y medio de pasajeros que la visitan anualmente, dándoles mayor comodidad” y se agregó que “la confitería de la planta alta pasará al piso inferior y, en su lugar, se ampliará la zona de check-in y pre-embarque con un sector VIP. También se agregarán 9 mostradores nuevos de check-in, completando en total 24, más 2 puertas de embarque y una manga, por lo que el aeropuerto tendrá 3 en total. Los tiempos de la obra, los equipos y el personal se están coordinando con las líneas aéreas y el concesionario Aeropuertos Argentina 2000, para garantizar que el espacio renovado esté listo para la temporada de invierno 2019”.
El otro tema que en 2017 complicó las operaciones se debió a una gran nevada y por ello para la próxima temporada invernal se disponen nuevos equipos y se entrena a los empleados de todos los sectores para evitar problemas. Es fundamental que los operarios se adelanten a una situación climática adversa y por ello se llevan a cabo el entrenamiento -con pronóstico en mano-, pero no se desconoce que la Naturaleza manda y muchas veces los más modernos aeropuertos del mundo deben cerrar sus operaciones a causa del mal tiempo.
La playa de estacionamiento de los aviones actual “quedó pequeña”, ya que hacia un costado se encuentra el sector de almacenamiento de combustible y en el otro -hacia el norte- está la vieja estación aérea. Este último edificio sería totalmente “derrumbado” con la finalidad de agrandar el sector donde llegan los equipos aéreos.
Como es sabido, por aquellos que conocen la aeroestación, existe otro lugar para que los aparatos se estacionen detrás del sector de combustible mencionado, es algo que se ve cuando uno va a bordo hacia la cabecera para despegar. En dicha plataforma se producirá un espacio de espera, una especie de “stand by” para aviones que deben tener una larga demora o que deban pernoctar.
Por último, quedaría solucionar que el SENASA disponga de un nuevo scanner, tres o cuatro serían ideales, para que los pasajeros no hagan largas filas al momento que las autoridades revisen -vía scanner- los equipajes.
