Cuarto intermedio en las negociaciones por el TUP

Frente a la situación de conflicto que vive el Transporte Urbano de Pasajeros de Bariloche, ayer por la mañana se constituyó una mesa de diálogo en la Delegación de Trabajo. Participaron Pedro Ponte por la empresa Mi Bus; el jefe de Gabinete, Marcos Barberis; Marcelo Iarlori por la UTA Bariloche y delegados. Las tres partes coincidieron en seguir trabajando y en que cada parte deberá poner “su granito de arena” para encontrar una solución.

Tras la reunión, en la que se analizaron diferentes alternativas para las frecuencias, los recorridos y las tarifas del Transporte Urbano de Pasajeros (TUP), se pasó a un cuarto intermedio, hasta el 21 de enero, ya que no se lograron tomar medidas concretas.

En diálogo con la prensa, Pedro Ponte expresó: “La solución la vamos a encontrar, yo solo no pude porque no depende de nosotros. Creo que la parte de Recursos Humanos tampoco la tiene que aportar y ni el municipio puede decir que vamos a subir tarifas, con un boleto a $35, $38 o $41”.

“La cuestión es que cada uno ponga un poquito y tratar de sacar esto adelante. Seguimos hablando y conversando, no es una guerra de unos contra otros”, declaró el propietario de Mi Bus. Respecto a la suma que recauda la empresa en concepto de publicidad explicó que “es un aporte, pero no es significativo. Para dar una idea la empresa paga 24 millones en sueldos, 10 de amortizaciones de colectivos y 8 de combustible”.

También habló sobre variables a analizar, como serían la cantidad de micros en circulación y el boleto estudiantil, tanto para colegios privados como para estatales. Pero aún no se decidió ninguna modificación sobre estos puntos.

Por su parte, Marcos Barberis, jefe de Gabinete municipal, destacó: “Creo que vamos a llegar a un buen puerto en conjunto, estamos todas las partes sentadas en una mesa”.

“Tenemos que ver cómo va a ir fluyendo el tema de los subsidios. No es un inconveniente solo de Bariloche, es un problema nacional”, subrayó.

Consultado por posibles modificaciones en el contrato con la concesionaria del servicio, aclaró: “Siempre existe la posibilidad, si las partes están de acuerdo. Nunca estamos cerrados a ninguna solución”.

El eje del trabajo en conjunto, como indicaron las partes, es el dinero restante del subsidio que el gobierno nacional suspendió, unos 8 millones de pesos. Sobre el tema, Iarlori acotó, “se deberá establecer si el mismo se modificará de acuerdo a la inflación, ya que de no hacerlo, dicho monto lo absorberá el gasto en materiales y sueldos”.

Sobre la posibilidad de despidos, Iarlori dijo “nosotros no vamos a entregar todo, estamos interesados en hallar una solución”. En tanto que la asesora legal del municipio, Natacha Vázquez, afirmó “la quita del subsidio fue un golpe duro en todo el país, pero la idea es trabajar entre las partes, municipio, empresa, provincia y trabajadores, para una solución del TUP”.

Entre las propuestas que aportó el gobierno municipal, según detalló Barberis, está la del “boleto eventual para turistas que desean ir a lugares como Llao Llao, Colonia Suiza o el Aeropuerto, donde no hay lugares para la carga de la SUBE, aún no hemos acordado cómo hacerlo, si el chofer recibe el dinero o si el turista deberá comprar un ticket, esto es posible porque lo que se recibiría de Provincia y Nación no es subsidio, sino un aporte”.

Y recordó que “el municipio no está en condiciones de realizar aporte alguno”, afirmó el jefe de Gabinete, reconociendo que “quizás podamos modificar algunos recorridos, optimizándolos”.

Ponte reconoció que una parte de la variable sería la disminución de unidades en el TUP, indicando “sí, porque no es lo mismo tener un boleto de un costo de cien seguros, patentes y amortizaciones, cuando en realidad se utilizan solo 70 los días pico y 45 los fines de semana, esto es, sacar vehículos ociosos que los mantenía el subsidio”.

Iarlori en el final afirmó “trabajaremos para que no quede ningún trabajador en la calle, aportando ideas y que el TUP siga funcionando”.