Heriberto Cuesta, primer campeón de la Carrera de Reyes

El sábado desde las 17.30, se llevó a cabo la tradicional Carrera de Reyes de Bariloche. Más de 400 deportistas de todas las edades se reunieron en el Centro Cívico para la primera carrera del año.

Heriberto Cuesta, el reconocido atleta barilochense, fue el campeón de la primera edición de la Carrera de Reyes, que se llevó a cabo en el año 1986. “De ahí en adelante, corrí casi todos los años y la gané categoría por categoría”, contó. Aunque nació en Jacobacci, casi toda su vida la pasó en Bariloche.

Este es el primer año que no participa, ya que está recuperándose de una operación de meniscos a la que fue sometido hace unas dos semanas. “Hoy es la primera vez que tengo que mirar la carrera, por una pequeña lesión que tuve”. A los 68 años, sufre la que es su primera lesión y tiene que relegar la competencia.

“Yo nací en Ingeniero Jacobacci pero me vine a los 15 años, más o menos, para acá”, explicó. “Empecé a correr en Jacobacci un día que se hizo una carrera. Nosotros andábamos por el campo y unos amigos míos me hicieron correr. Así que tuve que correr con alpargatas. Ellos, con zapatillas y pantalón corto y yo, en alpargatas”, relató entre risas. “Mis primeras zapatillas para correr fueron las Flecha con punta plástica”.

Desde ahí, el deporte lo acompañó toda la vida y nunca dejó de correr. “Jamás. Hace más o menos 53 años que estoy corriendo sin parar”, aseguró. “Es la primera lesión y la primera operación que tengo desde que estoy corriendo. Nunca tuve una lesión”.

La Carrera de Reyes

¿Y qué tiene de especial la Carrera de Reyes? “Para mí, es especial porque la primera edición la gané yo. Porque sé que nadie más va a poder ganar la primera edición de la Carrera de Reyes. Esa fue mía”, explicó con orgullo. “Y esta carrera es especial porque abre el calendario del año”, agregó.

Además, siempre participa con el Grupo HF de atletismo, de Hernán Ferreyra, que es su entrenador, y acompaña a los más chicos. “Siempre vengo a acompañar al grupo de atletismo que tenemos, nosotros acompañamos a los chicos”.

La carrera, dice, “ha cambiado muchísimo. En Mitre y Costanera, no entraba ni un alfiler. Yo corría por un pasillo muy chiquito. Venían de casi todos los barrios con bombos”.

“Antes se corrían 12 kilómetros y se corría por pasarelas. En el mismo horario que estamos corriendo hoy, se corría. Siempre había chiquititos, categoría por categoría. Había 4.000 o 5.000 personas en el público”, rememora.

“Yo corría para el club Alborada. Les quiero mandar un saludo porque fue el primer club en el que corrí. Estuve muchos años. Porque yo estaba entrenando muchos chicos. Llegué a tener hasta 300 chicos, desde un año para arriba”.

Tiempo de desafíos

Con respecto al año que empieza, además de recuperarse de la lesión, Heriberto tiene algunos objetivos deportivos que podrá buscar, tal vez, recién a partir de marzo. “Este año, me tuve que perder el Mundial en España por la lesión”, lamentó. Y “la de Esquel ya no la puedo a correr, esa la gané 16 veces. A esa, no llego. Espero llegar a los nacionales y espero llegar bien al Campeonato Mercosur que se va a hacer en Uruguay”.

Para Heriberto, hay motivación de sobra. “El objetivo mío es seguir entrenando hasta llegar a Deportista del Año. Ese es mi objetivo. Hasta eso, no paro”, aseguró, haciendo mención al reconocimiento que realiza la Subsecretaría de Deportes de la ciudad. “Así que ahora, a recuperarme y seguir adelante. Hay que tomarlo tranquilo”. Y explicó que esta semana empieza con sesiones de kinesiología y “después, me voy a meter a hacer kinesiología en el Gimnasio N° 3 con masajes para que la recuperación sea más rápida”.

El Mundial también es un objetivo al que se puede aspirar, “mientras sea más o menos cerca y tenga apoyo o algún sponsor”, aclaró. “Un saludo para toda la gente. Que se queden tranquilos que pronto voy a estar corriendo”.