García Larraburu aseguró que nunca dijo que votaría a favor de la legalización del aborto

La senadora barilochense defendió su voto en contra de la ley del aborto y repitió que las mujeres pobres no abortan, citando al padre Currulef y a los curas villeros de Buenos Aires en tal sentido.

En su primera presentación ante la prensa, luego de la histórica sesión del Senado, la parlamentaria barilochense fue indagada por la prensa respecto a su postura, su cambio y su vivencia antes y después de la votación del proyecto de ley de Interrupción Voluntaria del Embarazo.

“Yo hago política porque realmente creo en la política con mayúsculas, creo que es una actividad donde todos tenemos que poner lo mejor y en cada escalón que estuve, he tratado de ser honesta con mis valores, con mi familia, con mi crianza y ayudando a los demás. Esto tiene que ver con las convicciones más íntimas”, comenzó expresando.

Y siguió: “Yo me debo a la ciudadanía, a los votantes. Pero aquí había una mayoría, un sector muy importante de la sociedad silenciado, que también a partir de que manifesté cual sería mi voto he recibido por un lado mucho agravio y mucha violencia. Y sobre todo, que es lo más triste, de mujeres militantes de género, que deberían ser las más cuidadosas por ser las abanderadas del feminismo, no deberían violentar a otra mujer. Y por otro lado, recibí mensajes muy lindos, muy fortalecedores y que me dan la fortaleza para salir adelante”.

“Sin convicciones no hay sociedad, no hay política y este debate ha sido muy viciado de contenido. Si se escucharan las dos campanas y viéramos todos los intereses que hay detrás de esta causa, nos daríamos cuenta que se silenció una parte del debate muy importante que era importante que la gente lo conociera”, consideró la senadora rionegrina.

Consultada por su posible cambio de postura con el tema de la ley de Interrupción Voluntaria del Embarazo, García Larraburu respondió que cualquier persona que medianamente estudia sus proyectos y su línea política en toda su carrera política, podría advertir que iba a votar en rechazo a la ley.

“Tengo más de 20 proyectos presentados que tienen que ver con ayudar a las mujeres, a las madres, y la verdad que yo no hice ninguna declaración. Yo no di una sola nota respecto a este tema desde que se inició el debate. Sí hubo una postura de bloque, pero personalmente no hice pública cuál iba a ser mi posición al respecto. Por supuesto que uno viene a nutrirse de la ciudadanía, de la gente y de escuchar, ver si uno está equivocado, ver qué es lo que está sucediendo en la sociedad, hacia dónde vamos y cuáles son los intereses que están en debate en este tipo de proyectos”, indicó.

Ante la pregunta respecto de su afirmación sobre que las mujeres pobres no abortan, la parlamentaria se mostró molesta y respondió: “es lo que pienso, y cuando uno habla con los curas villeros en Buenos Aires, te dicen que es así”.

“No es la gente humilde la que más aborta, como se trató de instalar. El padre Currulef siempre lo decía, que la gente humilde siempre trasciende a través de los hijos. Yo camino mucho los barrios y uno ve familias con serios problemas económicos y tienen 6, 7 u 8 hijos y recuerdo que una mamá me decía que los hijos son lo único que iba a tener en la vida. Entonces hay que escuchar las dos campanas”, expresó.

Evaluó además que “este debate vino a dividir más a la sociedad y se instaló desde el gobierno nacional en un momento muy artero, con una estrategia de distraer la atención de los temas importantes y creo que hay que analizar todas las variables”.

“Hay que escuchar, analizar. Esto tiene que ver con decisiones muy profundas e individuales. Que merecen respeto. Lamento a los que defraudé, es mi posición. Yo no voy a analizar esta votación de acuerdo a si me va a redituar en más o menos votos. Yo el día de mañana me voy a mi casa, no me importa, yo hago política pensando en que realmente tengo que dar lo mejor de mí, y no me vengan a correr con que soy una muerta política o lo que sea. El día que termine la Senaduría me iré a mi casa, pero me voy a quedar con la conciencia tranquila que el tiempo que estuve en la función pública di lo mejor de mí, con convicción y honestidad. Es lo único a lo que debemos aspirar las personas que trabajamos en política por los demás”, cerró al respecto.