Municipio valoró el proyecto por Catedral y resaltó cambios logrados al convenio original

Por Diego Llorente
[email protected]

El secretario de Desarrollo Urbano de la Municipalidad, Pablo Bullaude, encabezó la exposición realizada entre el municipio y la empresa Catedral Alta Patagonia (CAPSA), en el marco de la segunda comisión tripartita de Turismo, Economía y Gobierno y Legales, en el seno del Concejo Deliberante.

En este ámbito, es que Bullaude aclaró que antes de ser presentada al Deliberante, el Ejecutivo analizó la propuesta, realizó modificaciones y trabajó junto a CAPSA. “No es solo una propuesta de la empresa, le hicimos modificaciones en los procedimientos y las formas de participación del Estado”, contó y resaltó que tanto en los años 2012 y 2013 como en el pasado, se hizo un ordenamiento del área urbana de la base del cerro, que dio fundamento al análisis urbanístico de toda esa zona.

“Buscamos el mínimo impacto posible en las intervenciones y que estén próximos a instalaciones urbanas ya existentes”, sostuvo. Graficó el informe con un estudio de base ambiental e informó que, en caso de ser aprobado el proyecto en cuestión, deberá ingresar otro al Concejo, para darle parámetros urbanísticos a las áreas en las que se van a trabajar. Todo dentro del rango uno del Código Urbano Municipal y allí se definirá qué es lo que se permite construir y qué no, en cada área.

El funcionario consideró que se debe elaborar “una política de estacionamiento en forma integral en toda el área Catedral, con zonas peatonales, de espacios públicos y que el desarrollo urbanístico tiene que estar condicionado a la infraestructura”.

Valoró las modificaciones realizadas desde el proyecto original que vence en 2026, al actual. En esa línea subrayó que el municipio no perderá la propiedad de la tierra y que en la extensión otorgada a la empresa, se pretendían 116 hectáreas para explotar por 50 años y que ahora se propone 75 hectáreas a 30 años.

Destacó también, el hecho de que el municipio como dueño de la tierra participe en su desarrollo, asociado a la empresa para obtener un beneficio. “El formato más seguro es el fideicomiso”, aseguró y opinó que “faltan estudios, etapas y un plan de negocios donde se defina el porcentaje de participación del Estado” en dicho negocio.

Evaluó positivamente la participación del Estado en el desarrollo urbano en términos de soberanía, ya que reconoció que “es importante, porque siempre dependemos de decisiones superiores y lo bueno es que el Estado tenga ingresos en pos de tomar decisiones propias”.

Bullaude planteó como objetivo “potenciar Villa Catedral como área urbana, con vida todo el año y con servicios de calidad”.

Propuesta urbana y turística

En relación a la propuesta urbana y turística, los referentes de CAPSA recordaron que el contrato original, firmado por la provincia en 1992, preveía un área de urbanización de 70 hectáreas, otras 40 de campo de golf y un futuro estacionamiento, en una zona ambientalmente frágil.

En base a la rediscusión de los términos con las áreas del Ejecutivo, se analizó la aptitud ambiental y potencial urbano, para acotar las intervenciones a las áreas más aptas, minimizar impactos, prever la proximidad con instalaciones urbanas, adaptarse a la topografía y preservar sectores vulnerables. Además de diversificar el uso del cerro con eventos culturales, deportivos, turismo de salud, complementarias a la actividad principal de la montaña.

Como responsable de seguridad de la empresa Catedral Alta Patagonia, Santiago Lennon describió que el centro de esquí local es el más grande de Sudamérica por su “momento potencia”, definido por diferentes aspectos, entre los cuales aparecen las ofertas técnicas y comerciales, cantidad de pasajeros trasladados por hora y graficó la ampliación que se pretende hacer en lo que hace al transporte de esquiadores.

Luego de hacer un comparativo con las montañas competidoras chilenas, categorizó a Catedral entre los denominados “centros de esquí de destino”, otra categorización evaluada por el rango de medios de elevación, la capacidad confortable de carga, el desnivel vertical, la existencia de un aeropuerto cercano y por la oferta de alojamiento, entre otros aspectos.

A su turno, el asesor externo en materia de desarrollo urbanístico, Horacio Fernández, dijo que se debe pensar en un cerro de cuatro estaciones y se brindó un informe técnico detallado de las características ambientales de toda la montaña y alrededores y de las zonas donde se va a intervenir con obras.

Planteó informes técnicos desde una línea de base ambiental, con unidades fisonómicas de paisaje, marcando aptitudes y condicionamientos, los caminos existentes y la conectividad actual que presenta la montaña.