Japón en alerta por desecho espacial capaz de provocar colisión catastrófica

El satélite japonés ADRAS-J ha detectado un desecho espacial de gran tamaño que representa una grave amenaza para los satélites y potencialmente también para la Tierra.

Se trata de un fragmento de un cohete lanzado en 2018, con una longitud estimada de 10 metros, que se encuentra en una órbita peligrosamente cercana a satélites operativos.

Esta detección genera preocupación, ya que una colisión con este objeto causaría una catástrofe espacial. Además de destruir cualquier satélite con el que colisione, también traería importantes consecuencias para las comunicaciones.

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Si bien la posibilidad de que ocurra un impacto en la Tierra es baja, no se puede descartar por completo. En caso de que este desecho espacial caiga en la superficie terrestre, podría ocasionar daños a personas y propiedades. Sin embargo, el mayor riesgo reside en el peligro que representa para los satélites en órbita.

Ante esta situación, Japón se encuentra a la vanguardia en la lucha contra la basura espacial. El país ha desarrollado diferentes tecnologías para capturar y eliminar estos desechos, además de trabajar en colaboración con otros países para buscar soluciones globales a este problema.

La misión del satélite ADRAS-J es capturar y estudiar este tipo de basura espacial. Su objetivo es probar tecnologías que futuras naves espaciales podrán utilizar para dar servicio a los satélites o para capturar y retirar desechos de órbita. Es la primera vez que un satélite captura imágenes de basura espacial durante una operación de encuentro.

Esta detección refuerza la necesidad de tomar medidas para limpiar la órbita terrestre y proteger la seguridad espacial. La basura espacial representa una amenaza cada vez mayor, por lo que es vital actuar para preservar la integridad de los satélites y la infraestructura espacial.