Ante la llegada del otoño y las lluvias, numerosos barilochenses se vuelcan de lleno a una práctica anual, que es la recolección de hongos comestibles.

En nuestra región se pueden encontrar principalmente en los bosques de pino. El hongo de pino es muy fácil de reconocer por la estructura de sus sombreros, marrones y pegajosos o jaspeados y secos, y la parte inferior con “esponjita” (tubos) en vez de “librito” (laminillas).

Sin embargo, desde el Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA) se emitió un alerta a los vecinos de la región por la presencia de la especie conocida como "matamoscas".

Se trata de hongos venenosos de la especie Amanita muscaria, que se hallaron en diferentes sectores de la región, desde San Martín de los Andes, Villa La Angostura y también Bariloche. Incluso, este diario, pudo registrarlos en la zona de Colonia Suiza (fotos).

Estos hongos, conocidos como "matamoscas" o "falsa oronja", son altamente tóxicos y pueden provocar graves problemas de salud, incluso la muerte, si se consumen.

Sus ingredientes activos, el muscimol y su precursor el ácido iboténico, son neurotóxicos y pueden causar síntomas como náuseas, vómitos, diarrea, alucinaciones, convulsiones y coma.

La Amanita muscaria es un hongo de gran tamaño y llamativo aspecto. Tiene un sombrero rojo brillante con manchas blancas, un pie grueso y blanco, y anillos en el tallo.

Desde el INTA aconsejaron a la población que si se encuentra un hongo que pueda ser Amanita muscaria, no hay que tocarlo ni consumirlo, y avisar a las autoridades locales o a un especialista en micología.