El padre de la conductora visitó el estudio de Desayuno Americano y tuvo una sorpresiva salida al confesar la atracción que siente por Luisa Albinoni.

Una inesperada y romántica situación se vivió durante estos últimos días en el estudio de Desayuno Americano, el programa que dirige Pamela David por la pantalla de América TV. ¿Qué pasó? El papá de la conductora, Alberto, se le declaró en vivo a Luisa Albinoni.

Todo esto tuvo lugar el pasado lunes, cuando Pamela invitó al piso del programa a su padre, quien se encuentra de visita en Buenos Aires, a que la acompañara en un momento del aire. En ese instante, él apareció frente a cámara y se empezó a tejer una situación bastante particular.

Antes de que la conductora le ceda la palabra a Alberto, ella sabía lo que se venía y por esa misma razón trató de mostrarse cómplice para el juego de cámaras que terminó dándose, preparando el escenario pero agarrando de todas formas de sorpresa a todos sus compañeros.

Fue entonces cuando el padre de David le hizo una inesperada declaración de amor a Luisa Albinoni, quien se mostró nerviosa y pareció no salir de su asombro. Por esa misma razón, antes de darle el pase a su papá, la presentadora le dijo a su panelista: "Hacete la difícil, Luisa".

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Entonces decidió encarar a Alberto y le dio pie a que salga todo su amor y admiración. "Acá está mi papá, Beto. ¿Le querés decir algo a Luisa?". Inesperadamente, lejos de recular o de achicarse, el padre de la conductora se soltó y comenzó a soltarse.

"En cámara es una mujer realmente muy linda, siempre te he admirado", dijo Beto, que al parecer estaba muy decidido sobre sus sentimientos mientras miraba a la famosa con absoluta admiración. "Muchas gracias", respondió Luisa, sonrojada por la situación y tomada de sorpresa.

El padre de Pamela reconoció que se siente atraído por la exvedette: "Yo soy enamoradizo, ya sabía que era linda, qué me voy a poner nervioso". Pero a esto le sumó un poco más de picardía, y hasta se animó a invitarla a su provincia y a quedarse en su departamento: "Está invitada a Santiago, es lindo", le lanzó.

"Me estoy poniendo nerviosa Beto", respondió entre risas Albinoni, que ya no sabía cómo esquivar las balas que le venían llegando de manera sorpresiva. Luego Pamela le bajó el telón a la romántica escena diciendo: "Yo me quedo acá de testigo".

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