Cierra el Museo de Geología y Paleontología del lago Gutiérrez

El director del Museo “Dr. Rosendo Pascual” de Geología y Paleontología del lago Gutiérrez resolvió cerrar las puertas tras ser obligado por la Municipalidad a habilitar el espacio como un comercio.

El museo funciona en Villa Los Coihues desde hace 24 años y cuenta con más de 10 mil restos fósiles. Periódicamente recibe a vecinos, turistas y alumnos de escuelas de Bariloche con un fin didáctico.

El espacio fue declarado de interés científico, cultural y turístico por la Municipalidad de San Carlos de Bariloche y la provincia de Río Negro. Además su director, Rodolfo Corsolini, fue destacado por el Concejo Deliberante con un premio al mérito “por su destacado trabajo paleontológico”.

Hace un año, el hombre fue multado por no contar con habilitación y la Municipalidad le otorgó una prórroga para inscribir el espacio como un comercio. Luego de recurrir a múltiples áreas del municipio y encontrarse con la negativa de las autoridades para hallar otra salida, decidió cerrar el espacio.

“No lo voy a habilitar como comercio porque no es un comercio” expresó Corsolini ante El Cordillerano. “Desde la Municipalidad me dijeron que no hay normativa para habilitar un museo, pero la AFIP dice que no necesita habilitación y el Código Civil tampoco lo contempla”, aseguró.

Según indicó Corsolini, la asesora letrada del municipio, Natacha Vázquez, le dijo “que no hay normativa para habilitarlo como museo, que esa posibilidad no existe por ordenanza”.

Corsolini recordó que hace un año y medio dos inspectoras municipales acudieron al museo e hicieron un acta. Lo multaron por 3.500 pesos y le exigieron hacer los trámites para habilitarlo. “En agosto tenía la clausura, pero gracias a que se acercó la senadora [Silvina] García Larraburu y la concejal [Julia] Fernández, me prorrogaron hasta marzo de este año” mencionó.

“Sentí mucha humillación y ya no hay vuelta atrás. Cuando no se entiende, no se entiende”, cuestionó el hombre.

Según recordó, en la década del 90 firmó convenios con la Municipalidad para el funcionamiento del museo, “pero lo que se firma por un lado, se borra con el codo por otro” sostuvo. “El municipio se ha aburguesado, se perdió la cultura que había antes”, planteó.

“Después de 24 años, mi labor social no importó nada, sino el dinero que yo puedo aportar. Me trataron como a un gusano, a mí y a mi institución”, disparó. “Estoy muy mal, me amargaron la vida. Podría haber presentado un recurso de amparo pero me cansé, yo ya no estoy para estas cosas”, agregó.

“No quiero problemas con nadie, hasta acá llegué. Así venga el papa a decirme que lo habilite, no lo voy a hacer” insistió. Corsolini dijo que su hijo Julián, biólogo y paleontólogo, invitó al intendente Gustavo Gennuso “para ver lo que hacemos, porque esto es algo muy lindo para Bariloche, pero no respondió”.

“El gobierno tiene que ayudar a la gente, no torturarla. Yo soy un idealista que piensa que el gobierno tiene que cuidarnos y no poner palos en la rueda”, reflexionó.

Consultada por este medio, la asesora letrada de la Municipalidad, Natacha Vázquez, explicó que el año pasado eximieron al museo por la multa “y se le dio una prórroga bastante extensa para que regularice su situación”.

Según precisó, “la norma prevé que cualquier espacio que sea de índole comercial, o sea que cobre entrada, tiene la obligación de habilitarse como comercio”. Actualmente, el museo cobra una entrada de 70 pesos por persona y los menores de 6 años no pagan.

En ese sentido, aclaró que el museo sí debe ser eximido de la Tasa de Seguridad e Higiene por ser una fundación.

“No deja de ser un lugar donde va gente y tiene que habilitarse, como cualquier otro lugar. Todos tienen que cumplir las normas, así sea una discoteca o un museo” sentenció la letrada.