Gennuso: “hay sectores que se venden como progresistas pero no quieren que nada cambie”

El jefe comunal analizó a la sociedad barilochense y su comportamiento frente a reclamos históricos y otros más actuales. Su opinión y la forma en que su gobierno ha encarado estas cuestiones.

El Cordillerano dialogó a solas con el intendente Gustavo Gennuso sobre diferentes puntos y uno de los cuales es un tema sensible. El hecho de que su gobierno haya defendido cuestiones como Ecotasa, la llegada de las low cost, la ampliación de la concesión del cerro Catedral o un playón de estacionamiento en el puerto y las acusaciones personales que ha recibido por su supuesto vínculo o intereses con empresarios.

Así respondió el mandatario: “Tenemos muchos vecinos y parte del sector periodístico, profundamente conservador, entonces es muy difícil vencer a los conservadores en ideas porque siempre van a querer el status quo. Y además, se venden como progresistas pero no quieren que nada cambie”.

“Entonces es muy difícil de entender a un progresista que quiere que nada cambie, que todo siga como está. Si fuera por esos actores, el puerto estaría todo tirado, sucio, porque votaron en contra de la Ecotasa, en contra de acuerdos con privados para mejorar desde lo público los lugares. Si fuera por ellos, todo estaría igual. No lo hicieron cuando pudieron, claramente no pueden ahora y no hablo solo de la oposición, sino de sectores de la sociedad que son profundamente conservadores. Entonces no es ni una crítica ni nada, sino establecernos en la sociología de la sociedad, donde sabemos que hay muchos conservadores”, continuó.

“Nosotros (el gobierno) tenemos problemas porque quebramos el conservadurismo de la sociedad, porque ponemos ideas creativas y originales para mejorar la ciudad. Y la verdad que no pretendo que todos las entiendan, pero están empezando a disfrutarlas”, dijo Gennuso.

Y en esa línea profundizó: “Se han hecho manifestaciones en contra de Fly Bondi, ¿Qué le molesta a la gente, viajar por 1.200 pesos?, porque la verdad que es un buen precio que permite que muchos que no viajaban, ahora pueden volver a hacerlo. ¿Les molestará ir al paseo de la Costanera como está ahora? ¿A los miradores cuando estén todos terminados? ¿Molestará todo eso? Porque la verdad que está mucho mejor”.

Yendo hacia otro de los puntos, el intendente contraatacó: “Antes uno pasaba por el estacionamiento del puerto San Carlos y era un desastre, ahora ves todo prolijo y bien hecho, como la ciudad se merece. Y hay que hacerlo de manera creativa. Antes no se hizo nada en Bariloche, porque no se podía. Y yo creo que otros intendentes no pudieron, no creo que no hayan querido. No creo que ningún intendente tenga la intención de hacer mal las cosas, pero no pudo, por diferentes razones. No le alcanzó la plata, tenemos grandes problemas, muchos atrasos. Yo reivindico el rol de muchos intendentes que seguramente quisieron, no hay nadie con mala voluntad que no quiera que su ciudad crezca”.

“Pero nosotros vinimos a poder. Y poder significa ser creativos. Hay que dejar atrás el conservadurismo y que quede todo como está, porque caso contrario, no crecemos. Estos son los dolores del parto, hay que crecer, salir adelante y eso genera dolores. Pero la gente se da cuenta que hay cosas que están mejor, que ahora están mejor”, agregó.

“Hay viejos reclamos que no los inventé yo, como el de la Costanera que era un desastre, que el ingreso a la ciudad no servía, que ese estacionamiento estaba todo mal. Nosotros lo hicimos. Si había otra forma de cambiarlo, no la encontré. Pero tampoco la encontraron otros, así que no debe ser tan fácil”, evaluó.

Pasando a otro de los temas por los que sufrió acusaciones, señaló lo siguiente: “Y con lo del cerro Catedral, yo siempre digo que no quiero que seamos la Kodak que siguió haciendo films en la era digital y tuvo que cerrar. Creo que está bueno poder modernizar la montaña. Fíjense lo que paso con el cerro Otto y eso va a tener una implicancia económica fenomenal, para el hospital zonal, el israelita y para todos aquellos que viven alrededor, los que viven de la torta en forma privada. Los negocios de enfrente, los transportes. Toda esa gente sufre de las consecuencias de que el cerro Otto haya tenido que cerrar unos meses. Entonces, si dejamos caer el cerro Catedral nos va a pasar lo mismo, en una proporción mil veces mayor, esa es la idea”.

Este diario le preguntó si no había una suerte de “mea culpa” en el gobierno, por cómo se abordó el proyecto, el acuerdo, su comunicación. Gennuso respondió que “seguramente esto del conservadurismo pesa mucho y no pudimos convencerlos. Cuando alguien me dice algo sobre el cerro en la calle, lo traigo acá a mi despacho lo siento y en quince minutos lo convenzo, siempre. Porque lo tuve quince minutos con conceptos para explicarle”.
“Lo que pasa es que vivimos en un mundo de conceptos, consigna y foto, el concepto de la red social. Entonces bajo el concepto de ‘venden todo’, nadie se pone a analizar que ya estaba vendido, que no teníamos nada, que ahora tenemos. Entonces para los oficialismos es muy difícil, porque uno tiene que explicar conceptualmente, en muchas palabras, en renglones. Y hay una sociedad, salvo los mayores, dispuestos más a la consigna y a la foto que al concepto”, prosiguió.

“Ese camino hemos tomado como sociedad, no solo los barilochenses, sino toda la sociedad argentina. Entonces es muy difícil de explicar algo conceptual, en un mundo de consignas, eso lo asumo. Quizás la tozudez y el convencimiento (de su gestión) forman parte de creer que no podemos gobernar para nosotros solos, sino también para nuestros hijos y nuestros nietos. Tenemos que pensar esa ciudad y ahí hay que tomar decisiones difíciles y una era esa”.