El juez Marcelo Álvarez Melinger homologó un acuerdo pleno de juicio abreviado y condenó a un sujeto que se declaró culpable por el delito de violación de domicilio. Había ingresado a la vivienda de su expareja en modo prepotente y amenazante.

Un obrero de la construcción identificado como B.O.O en la sentencia que publicó el Poder Judicial en su sitio web, resultó condenado a la pena de ocho meses de prisión y siguió detenido para dar continuidad a diversos trámites judiciales que lo involucraban.

El sujeto fue acusado por un hecho ocurrido el 9 de diciembre de 2022, cuando se presentó en el domicilio de su expareja, e ingresó a la vivienda sin su consentimiento, manifestando que no se retiraría del lugar porque era el padre de los niños.

Pese al pedido de la mujer, el acusado se mantuvo en el domicilio y cuando le advirtieron que llamarían a la policía respondió desafiante: “Yo no le tengo miedo a la gorra”. Pocos minutos después arribó un patrullero y el sujeto acabó detenido.

El hecho fue encuadrado en el delito de violación de domicilio y  como parte del acuerdo el acusado aceptó una condena de ocho meses de prisión efectiva, debido a que el sujeto ya tenía una condena previa por otros episodios de violencia de género contra la mujer.

De acuerdo a las constancias, el 27 de agosto de 2021 la jueza Romina Martini le había impuesto la pena de ocho meses de prisión de ejecución condicional, obligándolo a respetar ciertas pautas de conducta, entre las que destacaban no volver a delinquir y no acercarse ni tomar contacto con la mujer. Se trató de un juicio que unificó dos legajos por los delitos de lesiones leves doblemente agravadas por el vínculo y el contexto de violencia de género y desobediencia.

El fiscal detalló que en cuando la sentencia quede firme, se procederá a la unificación de las dos condenas y se determinará cuál es el total de pena que le corresponderá cumplir.

La defensora oficial Mónica Goye, consintió el acuerdo, lo mismo que el propio imputado, que admitió su culpa y resultó condenado.