Esta receta va muy bien para tu merienda: ya sea para acompañar con mate o un té, un clásico indiscutible.

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Ingredientes

• 500g. de harina
• 150g. de grasa
• 250cc. de agua
• 20g. de levadura
• 1 cdita. de azúcar
• 1/2 cda. de sal
• Azúcar extra para espolvorear

Preparación

1. Comenzamos colocando la levadura en el agua tibia y disolver. Reservamos mientras preparamos el resto de los ingredientes, hasta que espume.
2. Luego, disolvemos la grasa (puede ser al microondas) y dejamos que entibie, no debe estar caliente al agregarla a la masa.
3.  Vamos a hacer en un bol, una corona con la harina mezclada con el azúcar y poner la sal en los bordes. Es importante que esté en el borde y no en el centro ya que no debe tocar la levadura.
4. Después vamos a agregar en el centro el agua con la levadura y unir bien, con la mano.
5. Toca ahora incorporar la grasa a temperatura ambiente y formar la masa.
6.  Una vez hecho eso, pasamos a la mesada y amasamos unos minutos, hasta que tengamos una masa bien lisa.
7.  Estiramos la masa y la doblamos en tres partes. Volvemos a estirar. La idea es repetir este proceso un par de veces.
8. Estiramos la masa por última vez en una capa de unos 5mm.
9. Cortamos los bizcochitos de la forma deseada. Pueden ser redondos o, más fácil, cuadrados, con un cuchillo.
10. Nos queda pincelar con grasa derretida y espolvorear con azúcar sobre la grasa. Recuerden rociar con unas gotitas de agua para que caramelice.
11. Finalmente, horneamos a temperatura fuerte unos 10-15 minutos hasta que se vean dorados.