El elenco parisino volvió a la senda del triunfo, lo hizo tras vencer por 3 a 1 al Montpellier y sigue siendo el líder de la Ligue 1. El Lens perdió y el Marsella es el nuevo escolta tras disputarse 21 fechas del torneo local. Comenzó con el pie derecho el mes en el cual se mide por los octavos de final de la Champions League frente al Bayern Múnich.

En una jornada atípica, el equipo de las estrellas se impuso ante su rival y se consolida en lo más alto de la tabla de posiciones. La curiosidad es que a los siete minutos del primer tiempo el PSG se encontró con un penal que ejecutaría el francés Kylian Mbappé. El tiro lo lanzó al mismo lugar que los convertidos ante Argentina en la Copa del Mundo, pero el arquero Benjamin Lecomte le contuvo el disparo, aunque a instancias del VAR tuvo que volver a ser ejecutado por adelantamiento del arquero. En la segunda ejecución, ambos cambian de palo y tras un desvió, la pelota golpea contra el palo, dejando al delantero con total dominio de la pelota frente al arco con un arquero totalmente abatido, pero sorprendentemente, falló al disparo, enviándolo por encima del travesaño, haciéndolo aún más increíble.

A los 20 minutos de esa misma primera mitad, el atacante tuvo que salir del campo de juego por una lesión y su lugar lo ocupó Hugo Ekitike.

La apertura del marcador llegó a los 10 minutos de la segunda mitad, gracias a que Fabián Ruiz tomó la pelota luego de varios rebotes y la envió directa contra la red. El segundo gol, fue una verdadera obra de arte, el mismo Ruiz coloca un pase entre líneas para la llegada de Lionel Messi, que con poco espacio logra definir con majestuosidad ante la salida de arquero.

El Montpellier pudo descontar gracias a una gran definición de Arnau Nordin, a menos de un minuto de llegar al final del tiempo reglamentario, pero el recientemente ingresado Warren Zaire-Emery puso el 3 a 1 final cuando ya transcurrían dos minutos de adición.