El 9 de agosto se realizaron las elecciones en Kenia. Dos semanas después los dos primeros candidatos (con el 50,49 % y 48,85% de los votos escrutados) aun no reconocen los resultados. Si ninguno supera la mitad de los votos habrá segunda vuelta por primera vez en su historia. Los analistas aseguran que la incertidumbre durará un largo tiempo.

La fórmula que oficialmente salió segunda lleva como candidata a vicepresidenta a Martha Karua. Con una larga trayectoria en la lucha por los derechos humanos que se inicia contra la brutal dictadura de Daniel Arap Moi, derrocado en 1991.

En 1992 fue elegida diputada ocupando el cargo durante largos períodos. En el 2008 se convirtió en ministra de Justicia, pero renunció un año más tarde por no poder lograr una reforma judicial que transparentara, entre otras cosas, la elección de los jueces.

En el 2013 se presentó como candidata a la Presidencia pero apenas logró un 0,38% de los votos. Aun así ocupó varios cargos consolidando su popularidad actual.

La Constitución del 2010 prevé un cupo mínimo de un tercio para las mujeres en la Cámara de Representantes, pero aún no se legisló por lo que no se aplica y solo llega en la actualidad al 21%. Otros países de la región superan ese número: Ruanda con un 61%, Etiopía con el 40%, Tanzania 37% y Somalia 24%.

Las candidatas denuncian acoso, presiones, falsas denuncias, comentarios sexistas. Recaudar fondos para la campaña también tiene sus desventajas para ellas.

Los problemas de Kenia son diversos. Una fuerte escalada en los precios de los alimentos básicos, endeudamiento con organismos internaciones, tensiones étnicas, pobreza y desigualdad. Frente a esto, Martha Karua sostiene que es el momento para que las mujeres kenianas asuman el poder.