CONTINÚA LA BÚSQUEDA DEL HOMICIDA PRÓFUGO

| 25/01/2022

Jonathan Parra: la historia de un crimen artero y atroz

Jonathan Parra: la historia de un crimen artero y atroz

Las autoridades rionegrinas continúan la búsqueda de Jonathan Daniel Parra, quien se evadió del Penal 3 de la ciudad, en el que purgaba una condena de veintidós años de prisión, impuesta tras ser declarado coautor penalmente responsable del delito de homicidio agravado.

Parra, de 26 años, logró escapar del Establecimiento Penal 3 de la ciudad el pasado 10 de enero y es intensamente buscado por las autoridades judiciales, que ayer difundieron una fotografía de su rostro, apelando a la comunidad para dar con su paradero. Parra es buscado por el Ministerio Público Fiscal, en trabajo articulado con el Servicio Penitenciario Provincial y la Policía de Río Negro, luego de que se dispusiera un pedido de captura en su contra, que a su vez fue comunicado a las distintas redes provinciales y federales.

Pese a los esfuerzos y a diversos allanamientos y pesquisas desplegadas en su entorno, los resultados dieron siempre negativos y Parra sigue prófugo.

Parra fue condenado por el homicidio de Enzo Ulises Paillalef, un chico de 15 años que fue ultimado de manera artera y salvaje, al que literalmente molieron a golpes. El crimen ocurrió el 21 de septiembre de 2014, en la intersección de las calles José Luckman y Eluney, del barrio Nahuel Hue.

Aquella madrugada, Parra y José Aguilera, primos entre sí, persiguieron al adolescente a bordo de un Renault 19 que conducía Norberto Parra, padre del nombrado, hasta que lograron alcanzar a la víctima.

Valiéndose de un arma de fuego le efectuaron un disparo que impactó en la pierna izquierda de Paillalef, quien cayó al suelo y quedó en absoluto estado de indefensión. Aprovechando esas circunstancias lo golpearon, presumiblemente con un caño, en la cabeza. A raíz de ello sufrió múltiples fracturas en huesos de la cabeza y el rostro, que le causaron una hemorragia cerebral que derivó en el deceso.

Según se acreditó durante el juicio, tras consumar la agresión, Parra y Aguilera se acercaron al menos en dos oportunidades al lugar para presenciar el cuerpo moribundo del chico. Pero no se acreditó en las audiencias cuál fue el motivo por el que lo asesinaron. Es más, en su defensa alegaron durante el juicio que eran inocentes.

Al momento de pronunciar su alegato, el entonces fiscal de Cámara Martín Lozada solicitó la pena de 22 años de prisión y describió que Ulises Paillalef fue “víctima de un ataque artero y atroz”. No obstante la descripción, el fiscal solicitó la declaración de inconstitucionalidad de la pena de prisión perpetua que establece el Código Penal para los homicidios premeditados y reclamó una pena de veintidós años de prisión.

Los jueces de la Cámara Primera del Crimen, Marcelo Barrutia, Miguel Ángel Gaimaro Pozzi y Alejandro Ramos Mejía, consideraron que Parra (por entonces de 20 años de edad) y José Luis Aguilera (por entonces de 21 años de edad), eran los autores del delito reprochado.

Aludiendo al precedente “Colombil” y otros fallos del mismo tribunal, los jueces coincidieron con el planteo del fiscal Lozada y declararon para el caso en particular, la inconstitucionalidad de la pena de prisión perpetua que castiga el delito reprochado, fundamentando que “repugna al Estado de Derecho, la posición de penas pétreas inamovibles para diferentes situaciones y grados de culpabilidad, haciéndose de difícil cumplimiento el fin de prevención y resocialización del delincuente”.

Concluyeron en su análisis que “teniendo en cuenta la joven edad de los acusados, la escasa educación recibida y la ausencia de antecedentes penales, estas tres pautas como atenuantes, pero a su vez y como agravantes la naturaleza de la acción, los medios empleados para ejecutarla, la corta edad de la víctima, que tenía 15 años de edad y que además se trataba de una persona tranquila y pacífica y que se encontraba desarmado, constituyendo el hecho del que fue víctima -como bien lo calificó el señor fiscal de Cámara- un ataque artero y atroz, considero justo se les imponga la pena de veintidós años de prisión, con costas”.

Más allá de la cruenta historia, Parra y Aguilera cumplían su condena y apenas llevaban un puñado de años cumplidos en la prisión, hasta que Parra decidió evadirse. Por ello, el Ministerio Público fiscal apeló a la comunidad para que aporte cualquier información sobre su paradero o de los lugares donde se pudiera haber encontrado en las últimas dos semanas. Cualquier información debe ser suministrada a los teléfonos 0294 4422772 o 02944424167.

¿Que opinión tenés sobre esta nota?


Me gusta 0%
No me gusta 0%
Me da tristeza 0%
Me da alegría 0%
Me da bronca 0%
Te puede interesar
Ultimas noticias