Así lo aseguró la vicejefa de Gabinete y presidenta de la Comisión de Seguimiento del Transporte Urbano de Pasajeros (TUP), Marcela González Abdala. La funcionaria comentó que, tras el análisis de lo expuesto en la audiencia pública, está en estudio por la Asesoría Letrada y se calcula que para el próximo 21 de junio saldría la resolución que determine la actualización tarifaria del boleto.

Sin embargo, desde que se anuncia hasta que se aplica pasan unas dos semanas, ya que el sistema SUBE tiene que homologarlo, por lo que estaría en condiciones de cobrarse sobre las unidades para la primera semana del mes de julio, aproximadamente.

En cuanto al valor, la funcionaria expresó que va a estar lejos de los $94 pedidos por Mi Bus. Aunque destacó: “Venimos con un atraso en el valor de la tarifa y los $41 vienen desde octubre de 2019. Por la pandemia no se pudo cumplir con el contrato respecto de las dos revisiones anuales, con lo cual el monto al que se llega que parece tan aberrante, tiene que ver con el tiempo que lleva sin actualizarse la tarifa del transporte en la ciudad”.

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“Pero entendemos que sería inviable enfrentar ese costo de $94 para cualquier familia, tal como lo solicita la empresa. Nosotros en la mesa técnica hemos determinado que el costo de la tarifa debería ser de $120 sin subsidios. A pesar de esto, entendemos que el transporte tiene que ver con el acceso a otros derechos como la educación, la salud y el trabajo. Estamos evaluando fijar un monto razonable, que el porcentaje de incremento sea razonable, de modo que los vecinos puedan pagarlo y no se vean afectados en su economía familiar”, agregó.

Consultada al respecto, González Abdala dijo que la diferencia entre lo que la transportadora requiere y lo que finalmente el municipio otorga se cubre con subsidios mensuales de Nación (10 millones de pesos), Provincia (7,3 millones) y Municipalidad (6,8 millones).

“Cuando la gente dice que el Gobierno subsidia a la empresa, en realidad se subsidia al sistema de transporte. No solo a las personas que viajan gratis. Los tres subsidios pagan esa diferencia”, destacó.

Al respecto, recordó que el intendente Gustavo Gennuso, junto a sus pares de otras ciudades como Rosario, Salta, Mendoza y Neuquén, además de la UTA y la FATAP, está reclamando una mejor distribución de los subsidios, por lo que esperan tener resultados favorables en poco tiempo.

“Muchas ciudades del país están con el mismo problema que nosotros. Claramente hay que trabajar en el financiamiento del sistema porque como está planteado, no se sostiene”, concluyó.