El viento complicó el trabajo de los empleados municipales que debieron remover residuos y tierra para aplacar el fuego que comenzó a las 6 de la mañana y tapó de humo a los barrios de la zona.

Una quema que se salió de control habría provocado las llamas que, alimentadas por los gases del manto de residuos y las ráfagas de viento, creció de forma llamativa.

Sin embargo, el arduo trabajo de los empleados municipales permitió controlar la situación. El efecto del fuego invadió a los barrios aledaños, que amanecieron con una densa columna de humo negro y gris sobre las casas de los vecinos.

Fuentes policiales informaron que la situación ya está controlada, tras varias horas de trabajo. No acudieron bomberos del cuartel Centro.