Dirigentes vecinales reclaman que se garantice el transporte

Presidentes de varias juntas vecinales de Bariloche se acercaron al Centro Cívico para reclamarle a los funcionarios del gobierno municipal que garanticen el transporte urbano ante la reducción del subsidio nacional.

Los dirigentes barriales hablaron con el programa El Expreso Periodístico de El Cordillerano Radio desde el ingreso a la Municipalidad, donde esperaban que los reciba alguna autoridad.

El presidente de la junta vecinal del barrio Arrayanes, Máximo Calfuquir planteó su preocupación respecto a "la quita del subsidio, el aumento del boleto, la retención de servicios, las amenazas de paro y muchas cosas más".

"Eestaría bueno que si la empresa quiere irse, que se vaya, que no amenace. Ellos se comprometieron con un servicio de transporte que no están cumpliendo, entonces estamos preocupados por la situación que están viviendo nuestros vecinos, no la empresa, porque la empresa está ganando plata" expresó.

La presidenta de la junta vecinal del barrio El Frutillar, Bettina Fernández explicó que "estamos aquí hoy porque no hemos recibido respuestas de los funcionarios que se comprometieron a respondernos respecto a cómo iba a seguir toda esta cuestión".

"El vecino necesita tener la certeza de que el transporte urbano va a seguir, de que el subsidio va a estar. La realidad es que necesitamos una respuesta real ya de los funcionarios y llegar a una solución positiva para todos" agregó.

Fernández sostuvo que "si la empresa tiene la intención de despedir, ellos también son vecinos de la ciudad; si la empresa tiene intencion de parar perjudica a todos los vecinos. Somos cautivos de una empresa y necesitamos que se pongan las pilas".

La dirigente vecinal dijo que recibieron "de palabra alguna que otra respuesta de provincia pero nada en concreto, nada real".

También planteó su inquietud por los constantes incendios del vertedero que afectan a los vecinos, el aumento de los impuestos, principalmente del gas. "Nosotros estamos cercados por todos lados y no hay nadie que ponga un freno y diga basta" cuestionó.