“EN ESTADO CIRCULAR”

| 05/01/2019

Marchionatti presenta nuevo CD en su pago

Marchionatti presenta nuevo CD en su pago
Aristimuño, Zelaschi y Marchionatti.
Aristimuño, Zelaschi y Marchionatti.

El músico partió de Bariloche años atrás y enojado con el quehacer cultural de la ciudad. Pero, ahora, cada retorno es disparador de felicidad. Dos fechas aquí, antes de girar por la región junto a Tomás Aristimuño y Carola Zelaschi.

Un clásico: llega el verano y, con su distensión, retorna aunque sea fugazmente la multitud de artistas barilochenses que, en algún momento, decidió migrar para profundizar estudios o trayectorias en ciudades de mayor trajín.

Es el caso de Diego Marchionatti quien, en 2019, arribó con nuevo disco bajo el brazo: “En estado circular”. Aunque en formato solitario, irá a presentarlo el miércoles (9 de enero) desde las 21:30, en Culturica.

“Salió hace tres meses. Lo vine a presentar, en este caso, yo solito. Vine con la loopera a defender el disco pero, esta vez, en un marco de gira con Tomás Aristimuño y Carola Zelaschi”, le dijo a El Cordillerano. Cada uno con su show, “partimos de acá, después pasamos por el Valle hasta llegar a Neuquén, Villa Regina, Río Colorado, Viedma, Bahía Blanca y otros lugares, porque se empezó a armar y extender. Seguramente, aparezcan otras fechas”, aventuro el músico.

Marchionatti está contento: “Fue un año de meterle al disco nuevo. Pensé que no llegaba a tenerlo antes de fin de año pero estuvo antes de tiempo. En Buenos Aires, ya lo presenté con una banda muy numerosa, porque éramos trece, entre percusionistas, cuerdas, dos guitarras eléctricas más la mía. Un lindo quilombo… Ahora lo traje para mis pagos porque cada vez disfruto más de poder venir en los veranos y tocar”.

Tercero de su trayectoria, “esta vez, hicimos algo distinto porque, a los dos primeros, los había hecho en mi casa en un home estudio muy modesto. A ‘Nube’ (el primero) lo hice íntegramente yo y el segundo fue ‘Arista’, al que terminé de mezclar y producir con Fidel Mulet, el bajista con quien siempre trabajo. A este, lo grabamos íntegramente en su estudio”, señaló. “Venía pensando en letras y melodías y como siempre fui guitarrista, caigo al canto como más liviano. Siento algo personal, como que las letras y la melodía nunca pueden combatir a tantos años de estudio en guitarra pero, en este disco, me quedé muy contento con el laburo que hicimos”.

Para “En estado circular”, “estuvimos trabajando con compañeros que me dieron una mano en estética, en composición y en poesía. La idea era mantener un estilo propio pero sin dejar de probar cosas nuevas, desde los métodos de grabación que utilizamos, distintos a los otros dos procesos, a distintos instrumentos: cuerdas de verdad, por ejemplo… Quería un disco muy orgánico pero, a la vez, contundente. Cuando estoy tocando solo, está la canción más desnuda pero, en el disco, suena muy potente”. El cronista da fe.

Sólido, gaseoso y líquido

En cuanto al título, “viene de mi imaginación, pensaba en el estado sólido, gaseoso y líquido. Un estado circular que hiciera referencia a lo redundante que somos y a los errores que cometemos todo el tiempo y a los ciclos que se cumplen. Todo a lo que la forma circular se relaciona, las vueltas que se cumplen y lo que aprendemos o desaprendemos, más estando allá en la ciudad donde, de una u otra forma, uno se encuentra con la verdad. Me gustó mucho el nombre y hay un tema que se lo da al disco. Son diez las canciones. Esta vez, no hay ningún invitado ni tampoco algún cover. De golpe, tenía una cantidad enorme de canciones y dije: ‘bueno, vamos a ponerlas’. Estoy muy contento”, insistió.

En la secuencia de tres registros, hay continuidades pero también diferencias. “Mi yeite o mi zona de confort es que compongo con la guitarra criolla con cuerdas de nylon. Eso da una sonoridad o un toque a los discos, que tienen ese hilo conductor. Compongo desde ahí, después hago la melodía y después la letra, entonces el mecanismo unifica. Soy muy fanático de los arpegios y los arreglos en la guitarra, entonces siento que tienen un parentesco pero después, hay máscaras o diferencias y apunté a superar el audio. Me encanta hurgar y estar en todo ese proceso de laboratorio, tratando de buscar, ecualizar, comprimir, llegar a sonidos propios… Es la parte más divertida y distendida porque después hay que salir a laburar a tocar el disco”, bromeó.

Marchionatti también estuvo por acá en el verano de 2018 y El Cordillerano recuerda un concierto en la Biblioteca Sarmiento, quizás invierno de 2017 o 2016. Al periódicamente volver y, en este caso, con CD nuevo, “hay algo lindo en poder compartirlo con los amigos de toda la vida y con la familia, que van viendo el camino y el proceso de uno. Siempre que vuelvo, en los veranos, hay mucha gente amiga que se quedó a vivir acá o volvió desde otras provincias. Es un reencuentro que se espera, más allá de lo musical. Entonces, para mí es una especie de cumpleaños, aunque no haya sanguchitos de miga (risas)”.

Ocurre que “me fui amigando mucho con la idea de venir a tocar acá porque cuando era más pibe (ahora tiene 33 años) me fui diciendo: acá no hay más nada, se murió. Qué desastre la cultura… Con el tiempo, vi que hay mucha gente que la pone laburo y corazón a la cultura, si bien siempre hay todo un mecanismo en contra. Me di la mano con esa gente y, bueno, se abrieron un montón de lugares, muchos más de los que yo reconocía cuando vivía acá. Todos los veranos hay mucha movida y, quizás, en temporada baja también, cosa que antes no pasaba. Para mí, es una felicidad”, resaltó el músico. Para, al menos, un sector de Bariloche, también.

Gira soñada

No es la primera vez que Diego Marchionatti comparte escena con Tomás Aristimuño y Carola Zelaschi. “En Buenos Aires, hay muchos ciclos de cantautores y, en los círculos de músicos, empezás a conocer a todos. Ya hemos compartido, lo invito a un show mío y él me invita a los suyos, tenemos esa dinámica. Y justo coincidió que los dos estábamos en el sur, entonces se me ocurrió invitarlo a la fecha de Culturica. Me dijo: dale, buenísimo. ¿Y qué te parece si tocamos en tal lado? Y ahí empezó a armarse una gira que, la verdad, para mí es soñada”.

Es que los tres “vamos a estar en lugares donde nunca estuve con música propia. Así que con Tomy la mejor y con Carolina también, es una grosa. De la escena under del cantautor, por suerte, hoy hay muchas herramientas como para administrarte. Aunque sigue siendo difícil, estamos ahí empujando”. A la fecha del miércoles, en el reducto de la calle Moreno, hay que sumarle otra para Marchionatti el viernes en Kutral, donde dos días después repetirá Aristimuño.

Te puede interesar
Ultimas noticias