Quieren prohibir la pirotécnica sonora en todo el país

La propuesta pide que se elimine el estruendo y que se respete el derecho a la salud de las personas con autismo, bebés y adultos mayores, y también a los animales. En Bariloche está prohibida desde hace más de 20 años, aunque parte de la población no cumple con la ordenanza y se registran accidentes.

El diputado justicialista Eduardo Bucca presentó un proyecto en la Cámara Baja que pide la prohibición de uso y distribución de artículos de pirotecnia sonora. El texto es también el resultado de la unión de distintos grupos y organizaciones que buscan crear conciencia sobre el autismo y los derechos animales.

"En pos de construir una sociedad más inclusiva, presentamos este proyecto que prohíbe el uso y distribución de artículos de pirotecnia sonora superior a 84 decibelios", aseguran los firmantes de la propuesta. Y enfatizan: "Tenemos la obligación de evitar hacer sufrir a otros".

Ya en la Cámara Baja, el proyecto deberá ser tratado por la Comisión de Seguridad que preside Guillermo Montenegro y la Comisión de Industria presidida por José Ignacio de Mendiguren. Varias propuestas similares fueron presentadas en la última década sin éxito: sin ir más lejos, en 2014 y 2016 la senadora Magdalena Odarda llevó el tema a la Cámara Alta, pero no obtuvo dictamen favorable para ingresar al recinto.

Por otro lado, las cámaras y sindicatos que construyen estos explosivos protestaron el pasado miércoles en la puerta del Congreso para exigir que #PirotecniaCero no se convierta en ley.

La iniciativa busca que el uso de estos explosivos sea regulado y pide que se prohíba "en el ámbito de la República Argentina la comercialización, tenencia, manipulación, uso particular, fabricación, deposito, transporte, distribución y la venta al público mayorista o minorista, y venta ambulante en la vía pública, de artificios pirotécnicos cuyos efectos audibles o sonoros sean superiores a 84 decibles, cualquiera fuera su naturaleza y característica, como así también los denominados globos aerostáticos de pirotecnia".

También establece multas para quienes infrinjan la ley, además del decomiso de la mercadería y la clausura del comercio que la venda. Lo recaudado por esas multas -dice el proyecto- "deberá ser destinado a solventar campañas de concientización sobre los riesgos del uso de la pirotecnia".

Sí permitirá "pirotecnia que únicamente produzca efectos lumínicos, cuyos efectos sonoros en el aire sean inferiores a 84 decibelios, previa evaluación de la autoridad de aplicación", la que recaería en el Ministerio de Justicia y Derechos Humanos a través de la Agencia Nacional de Materiales Controlados (ANMaC) o el organismo que lo reemplace.

"El objetivo de este proyecto es proteger la salud, tranquilidad, bienestar y seguridad de personas y animales, el sano esparcimiento familiar y la protección del medioambiente", expuso el autor del proyecto.

El diputado de Bolívar forma parte de un equipo que viene trabajando "desde hace mucho tiempo con familias que conviven con personas con Trastornos del Espectro Autista". Bucca contó y recordó que durante su gestión como intendente de esa localidad puso en marcha una iniciativa que prohibía la pirotecnia sonora.

La iniciativa, además, pide derogar la actual Ley 24.304 que regula el comercio de pirotecnia y prohíbe su venta a menores de edad; y está alentada por la proliferación de regulaciones locales respecto de la limitación en el uso de artefactos pirotécnicos.

Bucca anhela un logro federal. "Creemos que es necesario implementar una legislación nacional que proteja y cuide a quienes se ven afectados por la pirotecnia", asegura respecto de las familias que son obligadas a cambiar de hábitos durante las fiestas de fin de año, por ejemplo, para que los estruendos no los afecten. "Tenemos el fin de aportar a una sociedad que respete y garantice el derecho de todos de disfrutar las fiestas, en una sociedad más justa e inclusiva", finalizó el diputado.

El ejemplo de Bariloche

Provincias como Neuquén, Mendoza, Tierra del Fuego y localidades como Bolívar, Bahía Blanca, San Martín de los Andes y Bariloche, son algunos de los lugares donde ya está prohibida la pirotecnia, aunque nunca se logra evitar su venta y uso total.

En el caso de nuestra ciudad, desde 1996 está prohibida por ordenanza la fabricación, comercialización y uso de cualquier tipo de pirotecnia. Además, la norma prohíbe la tenencia, fabricación, comercialización, depósito, venta -al público mayorista o minorista- y uso particular de todo tipo de elemento de pirotecnia y cohetería, sea éste o no de venta libre y/o fabricación autorizada.

Los gobiernos municipales decidieron hace algunos años, no realizar más los shows de fuegos artificiales que se ofrecían como un espectáculo en diferentes eventos (como la Fiesta de la Nieve), pero infringían con la propia normativa municipal.

Cada año, en la fecha cercana a las fiestas, desde el municipio se realizan controles para dar con venta clandestina de pirotecnia y si bien se hacen allanamientos y secuestros, nunca son suficientes, ya que llegadas las 12 de la noche del 24 o del 31 de diciembre, los estallidos que se ven y oyen son innumerables.