Viajes Solidarios Bariloche entregó donaciones en Pilcaniyeu y Comallo

Se realizó el Viaje Solidario Nº 98 para acercar donaciones a vecinos de la Línea Sur. Los lugares elegidos, en esta oportunidad, fueron Comallo y Pilcaniyeu.

En Comallo, se visitó el hospital donde se entregaron medicamentos y ropa para que, desde allí, lo hagan llegar a quienes más necesitan. En el sector del lavadero, reciben aportes y los vecinos saben que pueden retirar lo que les haga falta, un enorme aporte que hace el personal de salud para su comunidad.

Asimismo, en el barrio Malvinas, se aportaron libros, CD, y otros elementos para sumar a la iniciativa de abrir una biblioteca en el salón comunitario. Cuentan con un espacio amplio, calefaccionado con una gran estufa fabricada con el reacondicionamiento de un tambor grande y es el punto de reuniones, festejos y actividades barriales.

Ya retornando del viaje, se ingresó a Pilcaniyeu donde también se dejaron medicamentos en el hospital y, luego, el resto de la carga se entregó en la Residencia para Jóvenes donde, por ser el Día del Estudiante, sólo esperaba Gregorio, el portero, para recibirlas.

En ese espacio, permanecen los adolescentes de distintos parajes, de lunes a viernes; y, semana por medio, regresan a sus hogares los fines de semana. Como viven en lugares muy alejados, la única manera de cursar la escuela secundaria es hospedándose allí.

Ropa de abrigo, mantas, estanterías y una larga lista de donaciones serán entregadas el lunes cuando regresen a su rutina escolar.

La rueda de la solidaridad de los Viajes Solidarios Bariloche está activa. Ante el anuncio de una nueva salida, vecinos y amigos comienzan a acercar sus donaciones a Malón Accesorios en Elordi casi Albarracín, al Mercado del cruce del Km 8 de Pioneros y otros puntos.

Luego se retira todo, se cargan las camionetas y se parte, siempre, con rumbos diferentes.

Un regalo

La Ford f100, modelo 81 de Marcelo Bearzi perdió en algún camino de la estepa, el paragolpes, lo que fue comentado en la página de Facebook. Muy grande fue la sorpresa cuando Rafael Izzo, desde Mar del Plata, hizo llegar una encomienda donde venía el reemplazo; pero además, le sumó una caja de dirección. Poco a poco, se la sigue reparando para que pueda continuar llevando a destino las donaciones.

Son muchos los que aportan pero cabe mencionar un agradecimiento muy especial a Fundación Sí Bariloche y a los consultorios de calle Albarracín, entre tantos otros.