Plantean irregularidades en la investigación por el presunto suicidio de un interno del Penal III

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Se trata de Jonathan González, que murió durante la madrugada del 25 de diciembre pasado en la unidad penitenciaria, al colgarse usando sábanas.

En el marco de las acciones que solicitó la familia, la Justicia autorizó a que se practique una ampliación de la autopsia, teniendo en cuenta que había elementos que despertaban sospechas en el entorno de la víctima.

Una lesión en uno de los pies, producto del impacto de un perdigón, fue uno de los elementos que alarmaron a sus familiares, teniendo en cuenta que no habría recibido la asistencia adecuada dentro del establecimiento penitenciario. Además buscan saber si hubo participación de terceros cuando el joven decidió quitarse la vida.

Momentos antes de ese desenlace, González se contactó con sus hermanos a quienes nada les habría mencionado sobre su intención.

“El fiscal general (Martín Lozada) agotó en tiempo récord la instancia de investigación y decidió archivar la causa. Pero creemos que hay elementos llamativos, no sólo por esa celeridad sino también por irregularidades que se dieron en todo el proceso”, indicaron en la redacción de El Cordillerano.

El joven, que estaba detenido en el marco de una causa por el homicidio de Hugo Collihuin, tenía tendencia al suicidio y ello había sido advertido por su mamá a las autoridades penitenciarias. No obstante ella cree que “no le prestaron la atención que necesitaba, ni la asistencia psicológica. Lo dejaron morir y ello habla de una negligencia por parte del Estado”.