06/11/2017

La acusaron por tirarle un vaso de café caliente a otra mujer

- LA DEFENSA CUESTIONO SERIEAMENTE LA IMPUTACION -  Una mujer será investigada luego de que la fiscalía le imputara el delito de lesiones leves por haberle arrojado un vaso con café caliente a otra mujer con la que discutía. La fiscalía y la querella tendrán quince días para completar la pesquisa. La defensa cuestionó seriamente la acusación y ofreció dos testigos presenciales del hecho para rebatir los dichos de la denuncia.

La acusaron por tirarle un vaso de café caliente a otra mujer
Imagen ilustrativa.
Imagen ilustrativa.

La mujer acusada es María Gallardo, una mujer que vende fotografías con perros a los turistas en el Centro Cívico. La denunciante, Victoria Guzmán, una mujer con la que al parecer, mantiene un enfrentamiento de larga data.

Según la acusación que realizó la fiscal de grado Alejandra Bartolomé, el hecho se produjo el pasado 31 de julio en horas de la mañana. Según argumentó, la acusada se acercó a la denunciante y luego de una breve discusión le arrojó un vaso con café caliente en la zona del cuello, provocando una quemadura de carácter leve por el que la mujer fue atendida en el Hospital Zonal de la ciudad. La posición de la fiscalía fue sostenida por los abogados querellantes Daiana Puchy y Elio Gallardo.

La acusada manifestó su voluntad de rebatir los dichos de la fiscalía y sostuvo que ese día fue insultada y discriminada por su nacionalidad por parte de la denunciante, negando totalmente todo lo que había dicho la fiscalía en su acusación.

Los defensores Estanislao Cazaux y Marcos Miguel, por su parte, pidieron el rechazo de la formulación de cargos, subrayando que en la denuncia de la supuesta damnificada, la mujer había reconocido que fue ella quien se acercó a su defendida, lo que no coincidía con la acusación expresada por la fiscalía. Además, manifestaron tener dos testigos presenciales del hecho y solicitaron que se les tome declaración en el acto. Destacaron además que previo a la audiencia hubo un intento de conciliación penal, pero que la supuesta damnificada reclamó un resarcimiento de cincuenta mil pesos, demostrando su verdadero interés detrás de la denuncia. Además, consideraron excesivo el plazo de investigación que requirió la parte acusatoria, señalando que el caso estaba claro y que bastaban unos quince días para agotar el caso.

Finalmente el juez de Garantías Juan Martín Arroyo desestimó el planteo de escuchar a los testigos en la misma audiencia y consideró que sería necesario escucharlos en otra instancia, junto a los ofrecidos por la fiscalía y la querella, para disipar las dudas surgidas de las versiones contrapuestas. Finalmente otorgó un plazo de quince días para completar la investigación preliminar del hecho.

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