Lilian Costamagna da a conocer “Tango ajedrez”

El viernes desde las 19 Lilian Costamagna comenzará a presentar “Tango ajedrez”, su publicación más reciente. Pactó la cita en la Biblioteca Municipal “Presidente Alfonsín” y decimos que comenzará porque 15 días después hará otro tanto en la Sala de Prensa de la Municipalidad. El libro reúne una serie de cuentos que giran en torno al amor y en cierto sentido, marca una novedad en su trayectoria como escritora.

En la redacción de El Cordillerano, Costamagna contó que su flamante trabajo “surgió cuando (la coreógrafa y bailarina) Verónica Cutillo estaba preparando un festival de danza y me preguntó si quería ir a ver cómo bailaban, porque se le ocurrió que podía haber una interacción entre literatura y danza. Fui y de ahí surgió Tango ajedrez, que es un relato muy corto pero da título al libro. Es una desmitificación del macho argentino, de ese que la tiene a todas y qué sé yo… Termina con que son las mujeres las que lo subyugan a él y no sabe con quién quedarse”.

En el resto de las páginas “hay otros relatos cortos en los que se habla del amor en todas sus variedades y matices: el amor, el desamor, los desencuentros, el amor a distancia, la soledad, la infidelidad, el amor de madre a hija… Son textos nuevos, de los últimos dos años. Una amiga, Norma Dus, que escribió los comentarios en la contratapa, me dijo: ¿qué vas a hacer con todo eso? Porque yo siempre le leía… Entonces, pensé en inventar algo que tuviera como eje el amor en todas sus variantes”, explicó la autora.

Por las dudas, consideró necesario hacer una aclaración. “Siempre le digo a los que me preguntan que no vayan a pensar que es autobiográfico, porque si no van a creer que tuve muchas experiencias de ese tipo (risas). No, simplemente vienen de la observación de la realidad, la gente y las situaciones”, señaló. Más allá del convite de Cutillo, Costamagna eligió la temática porque “el amor es lo que sustenta la vida, todos sufrimos esas circunstancias: el amor, el desamor… Bueno, observando la vida real de las personas se me ocurrió”.

El ajedrez aparece en el título porque tanto “en el amor como en el juego, hay que saber mover bien las piezas (risas)”. La autora no tiene mucho que ver con el juego ciencia pero “tal vez con el tango sí, porque llevo dos nombres de tango. Mi papá era muy tanguero, cantaba muy mal pero cantaba. Me puso Lilian por el nombre de un tango y mi segundo nombre es Griselda, pero referido a Grisel, otro tango”.

Con el flamenco también

Evidentemente, la música ciudadana por excelencia sí incide en la escritura de Costamagna porque “tengo escrita una novela que está inédita, que se llama Tango flamenco, porque tanto en el tango como el flamenco hay dolor, angustia, tristeza… En este, (Tango ajedrez) quise hacer como un juego, una desmitificación de esa idea de relacionar al tango con la angustia porque juego con el humor”, advirtió.

En cuanto a la propuesta de Cutillo, si bien sirvió como disparadora de los cuentos, no llegó a plasmarse en la escena. “Estaba de viaje cuando se los mandé y me dijo que no lo iban a hacer porque había un solo hombre que se dignaba a bailar tango con el grupo. Como el texto es medio erótico, se me va a escapar, me dijo Verónica… Entonces, quedó ahí”, expresó la escritora.

El libro que dará a conocer el viernes implica una novedad en su trabajo literario. ”No es una continuidad porque las primeras obras sí que fueron autobiográficas (Mundosilvia y Desde mi globo rojo), contando historias de mi trayectoria docente que a mí me sacudieron y me motivaron.

Después, el tercer libro, Mayoría de edad, también tiene mucho de mi etapa docente, pero Peregrinando, es de relatos de viajes, de lugares que yo conocí. Me parece importante poder transmitir por el privilegio de haber viajado a esos lugares, sobre los que yo había leído he imaginado. Siempre digo que hay un maridaje entre el leer, el escribir y el viajar. Es un triángulo amoroso, entonces en ese libro hay relatos de viaje de Europa, de América, de Argentina, de Chile”, recordó.

Al momento de escribir sus cuentos, Costamagna no reconoce influencias claras. ”Yo tengo muchas lecturas y muy variadas. Admiro a (William) Faulkner o a (Juan) Rulfo, pero nunca traté de emularlos. Creo que si hay alguna influencia, llega con el tiempo, cuando sedimenta. Me dicen que hago prosa poética”, señaló. El lanzamiento editorial de “Tango ajedrez” es resultado del “esfuerzo propio. Me he presentado al FER, a la Editora Municipal… Hace poquito, gané un primer premio en novela, con una novela que está inédita”, anunció.

Se trata de “un premio internacional que se llama Dos segundos, dos disparos. ¡Primer premio! No lo podía creer pero parece que en tu lugar es difícil que te reconozcan, el reconocimiento viene de otro lado… Se va a publicar como e-book pero yo quiero editarlo en papel. Todavía no está disponible, lo estará por la editorial Mis escritos”, anunció Costamagna. Pero por el momento, es tiempo de que disfrute su volumen de cuentos.

La primera de las presentaciones será el viernes “en la sala de la Biblioteca. Eduardo Ehler, encantado siempre ofrece el espacio, que es chiquito. Invité a mis amigos y conocidos, así que creo que va a haber mucha gente. Norma Dus va a hacer la presentación y yo haré alguna lectura, no más que eso… El 18 voy a tener un espacio más grande en la Sala de Prensa. Van a bailar Jorge Marinao y Silvia Pino, un tango o una milonga para el cierre. Eso es lo que va a suceder”, adelantó la escritora. Y luego el brindis, claro.

A partir de un hecho real

La novela que premió la editorial “Mis escritos” transcurre “en Bariloche y en Santa Fe, a partir de un hecho real. Yo conocí al protagonista después de escribirla”, comentó su autora, Lilian Costamagna. “Surgió así: un compañero mío del Secundario de Santa Fe, me contó que estaba defendiendo a una persona que había matado a su mujer en Bariloche, sin querer. Cumplió la condena, estuvo 25 años preso y durante ese período estudió para ser abogado y se recibió en la cárcel”.

Así las cosas, “cuando mi amigo me pidió que yo participara, era para entregar una nota escrita por el reo a la Justicia, en la Cámara del Crimen, para que le dieran la finalización de la condena. Él estaba con libertad condicional en Santa Fe y hasta que no estuviera firme no podía ejercer la profesión. Así que entregué la nota, firmaron la copia y al mes o a los dos meses le dieron la definitiva. Ejerce como abogado y después, lo conocí”, insistió.

A partir de ese episodio, se produjo una visita de la musa. ”Cuando participé en esto, dije: tengo que indagar un poco. Efectivamente, había sucedido así, se había ido a vivir a Santa Fe y lo que quise, es reivindicar el valor de la educación para la reinserción social de los presos, una vez finalizada la condena”, señaló Costamagna, todavía enamorada de la profesión que desempeñó hasta retirarse.