23/10/2017

Matías Schmitt: el barilochense va por el sueño olímpico

- SNOWBOARD - El sábado viajó a Europa para empezar la última parte de la gira clasificatoria para los Juegos Olímpicos de Pyeongchang 2018.

Matías Schmitt: el barilochense va por el sueño olímpico
Matías (izquierda) y el entrenador de equipo, Santiago Gamen, en Mammoth Mountain (California).
Matías (izquierda) y el entrenador de equipo, Santiago Gamen, en Mammoth Mountain (California).

 

Por Verónica Lohrmann
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Es el argentino que más cerca está de lograr ese objetivo. Un sueño que comparte con el equipo nacional de slopestyle, la disciplina en la que compite.

Con el entusiasmo de estar a un paso, Matías Schmitt, de 26 años -muchos de ellos, sobre una tabla de snowboard-, viajó el sábado para comenzar el último período clasificatorio para los próximos Juegos Olímpicos de Invierno, que se van a llevar a cabo en Pyeongchang, Corea del Sur, en febrero de 2018.

La gira consta de seis competencias mundiales que aportan puntaje para clasificar a las olimpiadas: en noviembre, va a presentarse en Copenhague (Dinamarca), Milán (Italia) y Beijing (China); en diciembre, en Mönchengladbach (Alemania) y Copper Mountain y en enero, en Snowmass (ambas en Colorado, Estados Unidos). Le falta muy poco y cada punto cuenta. “Actualmente estoy en el puesto 42 y, en total, entran 40”, explicó.

Matías participa de esta etapa de definición junto al equipo argentino de slopestyle que está conformado por tres barilochenses, además de Matías, Federico Chiaradio y el entrenador, Santiago Gamen, y Martín Jaureguialzo, de Buenos Aires. El conjunto nacional comenzó este camino hace un año, en Colorado, y continuó participando de diferentes copas del mundo y del mundial de la disciplina. Además de entrenarse en Bariloche, Chile y Nueva Zelanda, con el objetivo de lograr esta clasificación.

No es la primera vez que lo intentan. “Desde el 2012, cuando se declaró que el slopestyle iba a ser disciplina olímpica en los Juegos Olímpicos de Sochi en 2014, empezamos a ir a competencias junto con Santiago Gamen en Europa, porque estábamos haciendo temporada en Andorra. Y después acá fuimos al sudamericano y nos fue bien. Un año ganó él. El año siguiente, gané yo. Y conseguimos el apoyo de la federación para hacer lo que fue la primera gira para la clasificación a los juegos olímpicos de invierno con slopestyle. Hicimos toda la gira pero lamentablemente no pudimos lograr la clasificación”.

Sin embargo, esa experiencia los impulsó a seguir soñando: “Después de eso empezamos más seriamente. Porque ahí íbamos a las competencias, teníamos apoyo, pero no éramos un equipo con entrenador, con entrenadores físicos, etcétera. Era diferente. Así que cuando terminó, Santi se puso como entrenador y se empezó a armar todo mucho más sólido, lo que es la parte de snowboard dentro de la federación. Y gracias a eso, hoy tenemos lo que es el equipo argentino de slopestyle, con entrenador físico, con entrenador técnico, con apoyo del ENARD. Todo mucho más profesional”.

Con respecto a los competidores, aunque se van dando recambios, en general, no hay grandes sorpresas. “En las competencias, muchos somos los mismos. A veces, hay algunos que cambian. Hay una lista más o menos de 150 o 200 personas que tienen puntos. Pero, por competencia, hay una cantidad de lugares. Por ejemplo, para Argentina para esta parte de la gira, tenemos solamente dos. Y así con todos los países, porque limitan la cantidad. Ahora, en las primeras competencias de ciudad que vamos a hacer, va a haber lugar solamente para 50 participantes. Entonces van rotando un poco”.

Ahora queda el período final de entrenamientos en Austria antes de la competencia. Con el objetivo claro y mucha determinación. “Venimos recontra motivados. Estoy muy cerca de lograr la clasificación. Y bueno, con eso en la cabeza, que sería un sueño cumplido”.

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El slopestyle

Dentro del snowboard es una modalidad libre o “freestyle”. El slopestyle se convirtió en disciplina olímpica hace pocos años, para los Juegos Olímpicos de Sochi en 2014.

Consiste en el descenso por una pista que tiene una secuencia determinada de obstáculos, rampas y barandas. Se realizan maniobras, saltos y “trucos”, que tienen una buena dosis de creatividad y expresión.

Los competidores hacen una serie de rondas y se evalúa técnicamente la dificultad y la fluidez de la ejecución.

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